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2007-06-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 15 de junio de 2007 El 15 de junio de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia de todos sus miembros: doctor Óscar Iván Zuluaga Escobar, Ministro de Hacienda y Crédito Público, doctor José Darío Uribe Escobar, Gerente General y los Codirectores, doctores Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan José Echavarría Soto, Juan Mario Laserna Jaramillo, Fernando Tenjo Galarza y Leonardo Villar Gómez, en la cual se discutió la situación inflacionaria y se tomaron decisiones relacionadas con las tasas de interés de intervención del Banco. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en la reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación En el mes de mayo la inflación anual al consumidor se situó en 6,23%, por fuera del rango meta establecido por la Junta Directiva del Banco para diciembre de este año (3,5% - 4,5%). Ello, a pesar de que se interrumpió la tendencia ascendente de la inflación, tanto en el grupo de alimentos como en el índice de precios al consumidor (IPC) sin alimentos. Si bien el promedio de los tres indicadores de inflación básica (sin alimentos, núcleo 20 y sin alimentos ni regulados) se redujo de 5,29% en abril a 5,21% en el último mes, también se ubicó por encima del rango meta de inflación. La inflación anual de transables se mantuvo alrededor del 2% a lo largo del año a pesar de una apreciación de 13% en el año corrido, mientras que la de no transables sin alimentos ni regulados presentó nuevamente un ligero repunte, al situarse en 5,1%. Los aumentos se observaron principalmente en arriendos pero también en otros subgrupos relacionados con la vivienda y la salud. Desde septiembre, mes en el que 2 alcanzó un punto mínimo, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados ha aumentado cerca de 90 puntos básicos. El comportamiento de los alimentos explica cerca del 77% de lo ocurrido con el índice global de precios al consumidor en lo corrido del año, y por ello es necesario sopesar la importancia relativa de elementos transitorios o permanentes en la evolución de sus precios. Los alimentos cerraron el mes con una inflación anual de 10%, muy cercana a la del mes de abril, debido al comportamiento de los alimentos perecederos (tubérculos, hortalizas, frutas y legumbres). Se trata de un patrón anticipado, al ceder los efectos del fenómeno de El Niño. Sin embargo, los incrementos en los precios de otros grupos de alimentos podrían ser menos transitorios. De hecho, el precio de los alimentos procesados, incluyendo carne y comidas fuera del hogar, continuó aumentando, tal y como lo viene haciendo desde marzo del año pasado. Los aumentos recayeron principalmente en la carne de res y sus sustitutos, lo cual sugiere que se mantienen los efectos de la mayor demanda venezolana y el proveniente de la fortaleza de la demanda interna. También se presentaron aumentos en la inflación de comidas fuera del hogar. Dentro del rubro de alimentos procesados se registró un buen comportamiento en los precios de los alimentos importados y/o más directamente afectados por precios externos. b. Contexto externo, crecimiento y variables financieras Los mercados externos mostraron una mayor volatilidad, como consecuencia del incremento en la percepción de riesgo asociado a posibles presiones inflacionarias, tanto en los Estados Unidos como en la mayoría de países desarrollados. El repunte del riesgo se debió en parte a los mejores indicadores en la industria, el comercio y el empleo en las últimas semanas, junto con los incrementos en los precios de la gasolina y los alimentos. A este hecho se sumaron los ajustes recientes en las tasas de interés por parte de varios bancos centrales, lo que afectó el desempeño de los mercados de activos y de divisas y produjo un repunte de las tasas de interés en los mercados internacionales. La 3 economía mundial muestra una fortaleza superior a la esperada y la probabilidad de incrementos en las tasas de interés externas ha aumentado. A pesar de lo anterior, los factores fundamentales como términos de intercambio y crecimiento de los socios comerciales son ahora más favorables para Colombia. Así mismo, no se esperan cambios importantes en los flujos de capital de largo plazo hacia el país. Los indicadores disponibles sobre industria, construcción y comercio confirman un muy buen desempeño de la economía colombiana en el primer trimestre del año. Lo anterior, sumado al dinamismo de los sectores agropecuario y de servicios del gobierno y a la información que divulgó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) sobre el crecimiento de obras civiles en el primer trimestre de 2007 (42,7%), llevó a que el equipo técnico del Banco estime que el crecimiento para el primer trimestre podría estar por encima del 7%. Por el lado de la demanda, la contribución de la inversión y el consumo de los hogares es similar. El consumo estaría creciendo alrededor del 8%, un ritmo semejante al observado en la segunda mitad de 2006. Factores como el crecimiento del crédito y las cifras preliminares de importaciones hacen pensar que el dinamismo se ha mantenido en estos meses. La cartera total del sistema financiero en mayo continuó creciendo a un ritmo anual del 34%, con signos parciales de moderación reciente, principalmente en el crédito ordinario. En los últimos dos meses las entidades financieras continuaron fondeándose con captaciones y con liquidación de TES. Respecto a la cartera en moneda extranjera, las cifras a mayo muestran una menor expansión a la observada un mes atrás (de US$ 115 millones frente a US$ 565 millones). La Junta ha incrementado paulatinamente las tasas de interés REPO desde abril del año pasado, pero la tasa DTF a 90 días y otras tasas activas y pasivas han crecido mucho menos; varias de ellas han incluso descendido en términos reales y las tasas reales activas se mantienen en niveles históricamente bajos. Hay convicción de que el incremento en las tasas REPO comenzará a sentirse con más fuerza sobre las demás 4 tasas de la economía en los próximos meses. Las tasas de interés nominales pasivas se mantuvieron sin cambios en mayo, en tanto que las tasas activas aumentaron. El incremento en el caso de las de consumo y tarjetas puede estar vinculado al reajuste en la tasa de usura. Las condiciones propicias para el crecimiento de la demanda agregada continúan vigentes. Por su parte, la demanda externa se mantiene fuerte y los términos de intercambio continúan siendo favorables. Estos elementos han mitigado el efecto de la apreciación sobre los sectores transables. 2. Discusión y opciones de política monetaria En desarrollo de la discusión, se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo anual de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco; (ii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sigue sin mostrar una tendencia hacia la baja; (iii) el equipo técnico del Banco ha elevado su proyección de crecimiento del PIB para el año, reflejando la importante dinámica que viene registrando la demanda agregada que supera las proyecciones iniciales; (iv) las proyecciones del equipo técnico del Banco sugieren una probabilidad no despreciable de que la inflación se sitúe por encima del rango meta fijado por la Junta, a pesar de que la inflación probablemente disminuirá en el segundo semestre del año; y (v) la apreciación de la tasa de cambio no se ha reflejado en los precios de los bienes transables. Se destacó que la economía colombiana sigue mostrando una importante dinámica que llevó al equipo técnico a ajustar al alza sus proyecciones para el crecimiento del PIB en el primer trimestre del año. Los indicadores disponibles muestran que la inversión y el consumo siguen comportándose favorablemente y que no se han presentado cambios importantes en el contexto internacional que afecten de manera negativa los términos de intercambio. Se estima que continúa presente el riesgo de presiones inflacionarias de demanda, si bien en el segundo semestre se espera que se 5 hagan más evidentes los efectos de los aumentos de las tasas de interés. Se destacó que el crédito continúa mostrando un crecimiento importante, con alguna moderación en las últimas semanas. Los principales puntos de divergencia entre los miembros de la Junta se refieren a los siguientes aspectos: (i) las posibilidades de reversión de los precios de los alimentos en lo restante del año; (ii) el comportamiento de los precios de los bienes transables y el efecto de la revaluación del peso; y (iii) la duración del mecanismo de transmisión de aumentos anteriores en las tasas de interés de intervención sobre las tasas de interés de mercado y la conveniencia de hacer ajustes adicionales en la presente sesión. Algunos directores expresaron su preocupación por la situación del crecimiento de los precios de los alimentos y la posibilidad de que la caída prevista para el segundo semestre sea menor que la inicialmente proyectada al concentrarse exclusivamente en los precios de los alimentos perecederos. Esto debido a que tanto el efecto de la demanda de alimentos procedente de Venezuela como el de los altos precios internacionales pueden ser más duraderos. En contraste, otros directores destacaron que los precios de algunas materias primas de los biocombustibles, han venido cediendo terreno a nivel internacional, como es el caso del azúcar, lo cual sería de prever que pueda ocurrir con el resto más adelante. Algo similar puede ocurrir con el precio del maíz, dado el volumen esperado de la cosecha de este producto en Estados Unidos. Estos elementos pueden tener un efecto importante en términos de la reducción de la inflación de alimentos. Algunos directores señalaron que debe estudiarse cuidadosamente el comportamiento de los precios de los bienes transables, los cuales no han reducido su tasa de crecimiento anual a pesar del comportamiento de la tasa de cambio, situación que puede presentarse con mayor intensidad en el segundo semestre del año. Otros señalaron que este hecho es evidencia de la gran dinámica que registra en el momento la demanda agregada. 6 Un grupo de directores manifestó la conveniencia de no incrementar las tasas de interés de intervención en esta reunión y revisar de nuevo el tema en la próxima, en espera a que las medidas ya adoptadas en este y otros frentes de política monetaria muestren sus resultados en registros más favorables de inflación. Destacaron que si bien las medidas tomadas por la Junta han mostrado un mayor rezago en los mecanismos de transmisión dado el cambio de la estructura de fondeo de los establecimientos de crédito que han estado liquidando inversiones en TES a favor de la cartera, algunas tasas pasivas vienen reaccionado al alza. Llamaron la atención sobre los posibles efectos que se pueden presentar en la tasa de cambio, al estimular mayores entradas de capital del exterior. También advirtieron que apretar en exceso la política monetaria cuando el PIB y el empleo vienen creciendo de manera satisfactoria desde hace cuatro años, y la inflación convergiendo hacia su meta de largo plazo, podría frustrar la expansión de la economía. Otros directores recordaron que a pesar de ajustes recientes, las tasas de interés de mercado en términos reales están en niveles históricamente bajos y algunas de ellas han disminuido desde que esta Junta inició el incremento de tasas en abril de 2006. Adicionalmente, subrayaron la importancia de las proyecciones de inflación y la necesidad de estabilizar las expectativas de inflación como condición para que la tasa de inflación converja hacia las metas de largo plazo. Finalmente, destacaron que en el momento el balance de riesgos indica más peligros de mayor inflación que de menor crecimiento. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría de votos aumentar en 25 puntos básicos las tasas de interés de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., 29 de junio de 2007
2007-07-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 27 de julio de 2007 El 27 de julio de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República, con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los Directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de la discusión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación En el segundo trimestre del año, la inflación total al consumidor quebró la tendencia ascendente que traía desde finales de 2006, cerrando junio en 6,0% (22 p.b. por debajo del nivel alcanzado en abril). Este comportamiento también se observó en todos los indicadores de inflación básica. La inflación anual de alimentos en junio (9,7%), disminuyó 30 p.b. frente al nivel registrado en abril. Como se esperaba, en el segundo trimestre las presiones alcistas generadas por la aparición del fenómeno de “El Niño” empezaron a ceder, en especial en los precios de los productos perecederos. Sin embargo, la inflación de alimentos procesados siguió aumentando, aunque a un ritmo cada vez menor, principalmente por el incremento en el precio de la carne, el cual siguió impulsado por la fuerte demanda interna y externa. Se espera que la inflación de alimentos siga disminuyendo en el tercer trimestre en la medida en que la situación climática se normalice. La reducción de la inflación sin alimentos y de los otros indicadores de inflación básica en los dos últimos meses refleja el comportamiento de los precios de los bienes regulados y transables. En el caso de regulados, la disminución se concentró en algunos servicios públicos, como gas domiciliario. Esta disminución se produjo a pesar de ajustes importantes en los precios de los combustibles y en las tarifas del transporte público. Respecto a los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados, la apreciación también habría incidido en ajustes relativamente bajos en los dos últimos meses que, en buena parte, recogen caídas en precios de bienes como electrodomésticos y automóviles. 2 Sin embargo, hay que señalar que dada la magnitud de la apreciación – 14,8% año corrido – la reacción de la inflación de transables a la tasa de cambio continúa siendo pequeña. Por su parte, la inflación de no transables sin alimentos ni regulados cerró el trimestre con una inflación anual de 5,1%, cifra superior al registro de marzo (4,9%) y al de diciembre (4,8%). El incremento se concentró en arriendos (4,3%), rubro que ha presentado aumentos relativamente importantes en los tres últimos meses. b. Crecimiento En el primer trimestre de 2007 el crecimiento del PIB fue 8,0%, levemente inferior al observado en el cuarto trimestre de 2006, pero superior al observado en años anteriores. El dinamismo económico continuó siendo impulsado por la demanda interna que aceleró su crecimiento a 11,0%. Sobresale el fuerte aumento de la inversión pública y de la inversión privada representada en maquinaria y equipo y en edificaciones de vivienda. El consumo de los hogares por tercer trimestre consecutivo creció a tasas superiores al 7,0%, mientras el consumo público cayó 0,5%. La demanda externa neta continuó siendo negativa (-7,9% del PIB) por el mayor dinamismo de las importaciones, las cuales crecieron en el primer trimestre a una tasa real anual de 21,8 %. Las exportaciones lo hicieron al 9,4%. El crecimiento anual del 26% observado en las importaciones de bienes de capital, la fuerte expansión de las licencias de construcción a mayo y la aceleración de los desembolsos de crédito hipotecario reflejan el gran dinamismo observado en la inversión. Para el resto del año se prevé que continúe el buen desempeño de la inversión pública y privada, con un crecimiento conjunto de 21%. La dinámica del consumo privado se ha desacelerado levemente en los últimos meses, pero para 2007 se espera un crecimiento similar al observado en 2006. Las diversas medidas de utilización de la capacidad productiva siguen en niveles históricamente altos, aunque muestran una ligera reducción en los últimos meses. c. Costos y salarios El ritmo de crecimiento anual en los costos de las materias primas muestra una importante desaceleración en el segundo trimestre del año al pasar de 4,8% en marzo a 0,3% en junio. En buena parte, esto es el resultado de la reducción en la inflación del IPP de productos importados. En lo corrido de 2007 los ajustes salariales en la industria y el comercio han sido similares o levemente inferiores a los que tuvieron lugar en 2006. Para el segundo semestre no se prevén presiones inflacionarias en el mercado laboral. d. Contexto internacional 3 Durante el segundo trimestre de 2007 la coyuntura internacional estuvo marcada por un crecimiento de la economía mundial y precios de los productos básicos “commodities” mayores a lo previsto hace unos meses. La inflación en varios países ha retomado una tendencia ascendente que puede llevar a aumentos en las tasas de interés y a una reducción de la liquidez internacional, principalmente en el 2008. Se considera, sin embargo, que estas alzas serán moderadas y harán parte de una normalización de la situación de liquidez en los mercados internacionales. El contexto externo para la economía colombiana seguirá siendo favorable. La coyuntura actual permite esperar mejores términos de intercambio, en parte por los recientes aumentos del precio del petróleo. Por otro lado, se estima que la demanda de nuestros socios comerciales continuará mostrando una gran fortaleza, especialmente en Venezuela. Igualmente se espera que continúe el flujo de inversión extranjera al país. e. Variables financieras En los últimos meses se ha moderado el crecimiento anual de los agregados monetarios. Así, mientras en abril el agregado M3 aumentó a una tasa anual de 21%, en junio su ritmo de crecimiento fue de 17% aproximadamente. El grueso de la desaceleración se originó en el comportamiento de la demanda por efectivo, la cual ha venido creciendo a tasas cada vez menores desde mediados del año pasado. Por su parte, los depósitos en el sistema financiero se desaceleraron en los últimos dos meses después de varios meses de aceleraciones continuas. En los últimos meses parece haberse disminuido el proceso de recomposición del activo de las entidades financieras desde TES hacia cartera. De consolidarse esta nueva tendencia, podría significar menores recursos para la expansión de cartera, permitiendo una más rápida transmisión de la política monetaria al crédito y a las tasas de interés de mercado. En el segundo trimestre se observó una leve desaceleración en el ritmo de crecimiento del crédito, el cual se mantuvo sin embargo a tasas nominales muy altas. Mientras en marzo el crecimiento anual de la cartera bruta total fue 31,2%, en junio dicha tasa fue 29,5%. La desaceleración ha sido más importante en la cartera comercial y en menor medida en la cartera de consumo, pero ha sido compensada por la aceleración de la hipotecaria. No obstante, las tasas de crecimiento de la cartera comercial y de consumo siguen siendo altas tanto en términos anuales (25,1% y 44,2% respectivamente), como en términos mensuales anualizados (18% y 38%). Las tasas de interés vienen mostrando un comportamiento al alza. En efecto, la tasa promedio de los CDT se situó en 8,35% en junio frente a 7,79% en mayo. Por su parte, la tasa activa promedio se situó en 15,3% frente a 14,8% en mayo, parcialmente gracias al aumento de las tasas de usura. La tasa promedio de los CDT acumuló un incremento de 220 p.b. desde abril del año pasado. Frente a abril de 2006 las tasas de consumo y ordinario 4 presentan menores aumentos (71 p.b. y 151 p.b.) que la tasa de política, mientras que las de crédito preferencial y de tesorería (357 p.b. y 409 p.b.) han subido más. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo anual de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco. Lo anterior, a pesar del quiebre observado en la tendencia ascendente de la inflación, que había sido proyectado por la Junta; (ii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sigue sin mostrar una tendencia a la baja; (iii) el equipo técnico del Banco ha elevado su proyección de crecimiento del PIB para el año, lo cual incide en el tamaño de la brecha del producto; (iv) la apreciación del peso no se ha reflejado de manera significativa en los precios de los bienes transables; y (v) las expectativas de inflación, si bien se han reducido, todavía se sitúan por encima de la meta. No obstante, la Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención y la modificación en los encajes han empezado a mostrar los efectos esperados en el comportamiento de los precios, la dinámica del crédito y los agregados monetarios. Esto indica que la transmisión de las tasas de interés del Banco al resto de la economía se ha acelerado. Algunos factores como la recomposición que empieza a observarse de inversiones de los bancos hacia TES y el mayor espacio que ahora permite la tasa de usura, podrían generar una transmisión aún mayor de las tasas en los próximos meses. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) la velocidad e intensidad con la cual se manifiestan los efectos de las medidas de política monetaria adoptadas hasta el momento; (ii) la incertidumbre sobre el comportamiento de la inflación para lo que resta del año y la posibilidad de que la disminución de la misma pueda ser menor a lo previsto inicialmente; (iii) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, la posibilidad de que cambios en el contexto internacional produzcan alteraciones abruptas en la demanda agregada y el crecimiento del producto; y (iv) el impacto de la brecha del producto en la inflación. Algunos directores destacaron que los factores que explican la alta tasa de crecimiento de la economía continúan vigentes. Las tasas de interés reales se mantienen bajas en términos históricos, la demanda externa continúa fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables y el crédito crece aún a tasas elevadas. Adicionalmente, el incremento de los precios de la vivienda puede reforzar el crecimiento del gasto. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada continuará expandiéndose a ritmos elevados. La mayoría de la Junta consideró que el balance de riesgos de los factores antes reseñados justifica un aumento de las tasas de interés de intervención. Igualmente, que esta acción es coherente con el propósito de hacer sostenible el crecimiento de la economía y garantizar la convergencia de la inflación hacia la meta de largo plazo. Otros directores propusieron hacer en esta ocasión una pausa y posponer una eventual decisión sobre un nuevo reajuste en las tasas de intervención del Banco hasta la 5 próxima reunión en el mes de agosto, con el objeto de contar con mayor y mejor información sobre los reales efectos de las medidas hasta ahora tomadas. Al respecto, señalaron que se pueden estar subestimando los efectos de las medidas de política monetaria adoptadas a lo largo del último año, las cuales han sido reforzadas por decisiones tales como el recorte del gasto público, el aumento de las tasas de interés de usura y las mayores provisiones para la cartera comercial derivadas de la aplicación del SARC por el sector financiero. Manifestaron que el crecimiento esperado del producto no necesariamente genera presiones inflacionarias dado el gran aumento de las inversiones y la productividad en la economía, y de las importaciones de bienes de capital y de bienes intermedios, el cual indica un excelente comportamiento reflejado en la ampliación de la capacidad instalada. Además no se observan cuellos de botella ni presiones inflacionarias en el mercado laboral. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría de votos aumentar en 25 puntos básicos las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., 10 de agosto de 2007
2007-08-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de agosto de 2007 El 24 de agosto de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor se redujo en julio, por tercer mes consecutivo, cerrando en 5,77%, 26 puntos básicos (pb) por debajo de la del mes anterior y 49 pb menor que su nivel máximo reciente alcanzado en abril. Este comportamiento favorable también se observó en todos los indicadores de inflación básica utilizados por el Banco de la República. El promedio de esos indicadores pasó de 5,1% a 5,0% entre junio y julio, continuando el proceso de reducción que se venía observando desde el mes de abril cuando llegó a 5,3%. La inflación anual de alimentos siguió disminuyendo, como se esperaba, principalmente por la normalización del clima y su efecto en la caída en los precios de los alimentos perecederos. También se observó una disminución en la inflación de los alimentos procesados, explicada por una pequeña caída en el precio de la carne. La inflación de bienes transables diferentes de alimentos bajó de 1,76% en junio a 1,62% en julio, manifestando una caída que es, sin embargo, pequeña frente a la apreciación acumulada del peso del último año. La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, continuó creciendo, comportamiento que viene presentándose desde el mes de abril, y se situó en 5,45%, frente a 5,1% en el mes anterior. Dentro de este grupo se destacan los arriendos, cuya inflación anual a julio se situó en 4,8%, frente a 4,6% en junio. Para el subgrupo “Resto” que excluye arriendos, la inflación anual subió 43 pb y se situó en 6,3%, debido fundamentalmente al aumento del rubro de “diversión, cultura y esparcimiento”. 2 La inflación de regulados disminuyó. Estos precios están atados parcialmente al índice de precios al productor (IPP) y han resultado favorecidos por la caída absoluta que se observa en este indicador, muy vinculada al comportamiento de la tasa de cambio. El ritmo de inflación correspondiente al grupo de bienes y servicios regulados del índice de precios al consumidor (IPC) se redujo de 7,4% en junio a 6,6% en julio, a pesar de presiones al alza provenientes del precio de los combustibles y del transporte público. b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras La información disponible continúa mostrando una dinámica fuerte en el crecimiento económico interno. El DANE informó que en junio la producción industrial creció 11,9% y las ventas del comercio aumentaron 9,2% frente al mismo mes del año anterior. En la industria, el total de obreros contratados creció 4,2% y en el comercio el aumento fue de 6,6%. Así mismo, el desempeño de las licencias de construcción al mes de junio (aumentaron 39%) anticipa un crecimiento alto para esta actividad económica en la segunda mitad del año. Las exportaciones a mayo siguieron aumentado con un crecimiento en el acumulado de los últimos doce meses del 15%. Este desempeño se explica tanto por el comportamiento de las exportaciones tradicionales como de las no tradicionales, destacándose las exportaciones a Venezuela que crecieron 47%. El fuerte crecimiento de las importaciones a junio (26% para el acumulado a 12 meses) no muestra cambios importantes frente a las tendencias que se observaban en meses anteriores. Las importaciones de bienes de consumo en dólares crecieron en este mes a una tasa superior al 30%. En este mismo período, las importaciones de bienes de capital y de bienes intermedios aumentaron a una tasa cercana al 25%, reflejando la buena dinámica de la industria manufacturera Contexto internacional Los mercados han exhibido mayor volatilidad que en meses anteriores como consecuencia de la crisis del sector hipotecario “subprime”. La incertidumbre sobre sus efectos, además de los elevados niveles de apalancamiento de los inversionistas, se ha reflejado en un menor apetito por activos riesgosos y una importante disminución de la liquidez de los mercados. El efecto de esta coyuntura sobre los mercados emergentes se ha dado a través de un aumento en la prima de riesgo (medida por el EMBI+), que, sin embargo, ha sido menor a la observada en los bonos especulativos del mercado americano. La reacción del tipo de cambio fue más alta en Colombia que en los demás países de la región, pero la pérdida de valor del mercado bursátil fue moderada. Otros activos nacionales como los TES de largo plazo también experimentaron pérdidas. 3 Variables Financieras Los agregados monetarios continuaron desacelerándose en julio, en parte como resultado de un menor ritmo de crecimiento del efectivo. Respecto a los pasivos sujetos a encaje, su ritmo de expansión también se ha moderado recientemente aunque a julio seguía siendo alto. En los últimos meses se ha notado una recuperación relativa de las captaciones de los CDT frente a las cuentas corrientes. El crédito también se desaceleró nuevamente en julio. La cartera total creció a un ritmo anual de 28,5% frente a 29,5% en el mes anterior. La moderación en el crecimiento se observó en todos los tipos de crédito excepto en el hipotecario el cual ha continuado ganando impulso: su crecimiento anual pasó de 17,3% en junio a 19,4% en julio. En el último mes, la cartera de consumo se expandió a una tasa anual de 23,4%, que corresponde a un crecimiento trimestral anualizado de 31%. La tasa de interés interbancaria (TIB) se situó en promedio en 9% en junio, aumentando 20 pb en el último mes y 310 pb desde abril de 2006 cuando la Junta Directiva del Banco de la República comenzó a incrementar sus tasas de interés de intervención. Las tasas de interés nominales pasivas aumentaron levemente en julio (entre 16 pb y 21 pb), acumulando un aumento desde abril de 2006 de alrededor de 180 pb (240 pb para CDT solamente). El ajuste fue mayor en el caso de las tasas activas, especialmente en consumo y tarjetas de crédito, las cuales se han acercado a las de usura. Entre abril de 2006 y julio de 2007 las tasas de crédito preferencial y de tesorería acumulan un aumento de 424 y 457 pb, respectivamente. En dicho período el aumento en las tasas de crédito ordinario, de consumo y con tarjetas ha sido mucho menor: 183, 230 y 280 pb, respectivamente. Respecto a las tasas reales, estas se encuentran cerca de los niveles históricos promedio observados para la década en la mayoría de casos, excepto en el crédito preferencial y de tesorería en donde ya lo superan. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) las cifras de julio confirmaron el quiebre de la tendencia ascendente en el ritmo anual de crecimiento de los precios que ya se había detectado en los dos meses anteriores; (ii) a pesar de lo anterior, la inflación se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, sigue mostrando una tendencia al alza; (iv) la demanda agregada mantiene un fuerte dinamismo; (v) la apreciación de la tasa de cambio no se ha reflejado plenamente en los precios de los bienes transables; y (vi) todas las expectativas de inflación han bajado: las de mediano plazo se ubican por debajo del 4% aunque las de corto plazo se mantienen por encima de la meta. Se destacó que los factores que explican la alta tasa de crecimiento de la economía continúan vigentes. La demanda externa se conserva fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables y el crédito sigue creciendo a tasas elevadas. En 4 conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada continuará expandiéndose, impulsando el crecimiento de corto plazo de la economía. La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención y la modificación en los encajes continúan mostrando los efectos esperados en el comportamiento de los precios, la dinámica del crédito y en los agregados monetarios. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) la incertidumbre sobre el comportamiento inflacionario para lo que resta del año y la posibilidad de que la disminución en el ritmo de crecimiento de los precios pueda ser mayor a lo previsto un mes atrás; (iii) el impacto del crecimiento en la brecha del producto; (iv) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, que modificaciones en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en la disponibilidad de financiamiento externo, y en las tasas de cambio y de interés relevantes para las economías emergentes; y (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana. La mayoría de la Junta consideró oportuno hacer una pausa en el incremento de las tasas de interés de intervención del Banco de la República con el fin de obtener mayor información para evaluar las posibles consecuencias que podrían presentarse por la volatilidad de los mercados externos y los efectos de la política monetaria sobre la demanda agregada y las perspectivas inflacionarias. A este respecto se destacó que la información disponible muestra que la transmisión de la política monetaria a las tasas de interés de la economía se está reflejando con mayor rapidez, lo cual se aprecia en los aumentos de las tasas de interés de la economía y en la caída del ritmo de crecimiento de los agregados monetarios y el crédito. Otros directores señalaron su preferencia en continuar con los aumentos de las tasas interés de intervención. En particular, destacaron el alto dinamismo de la demanda agregada, el comportamiento al alza de los precios de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, y que los crecimientos de los agregados monetarios y del crédito siguen en niveles altos. Expresaron su preocupación de que, si bien la inflación y las expectativas de inflación vienen mostrando una tendencia a la baja, su disminución ha sido menor a la esperada, lo cual dificulta la convergencia de las mismas a las metas de inflación futuras. Finalmente, consideraron que posponer el incremento en las tasas podría hacer necesarias tasas de interés más altas en el futuro. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., septiembre 7 de 2007
2007-09-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 21 de septiembre de 2007 El 21 de septiembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. El director Fernando Tenjo estuvo ausente por razón justificada. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor se redujo en agosto, por cuarto mes consecutivo, cerrando en 5,2% (55 p.b. por debajo de la del mes anterior). Este comportamiento también se observó en todos los indicadores de inflación básica. La inflación anual de alimentos continuó disminuyendo, como se esperaba, principalmente por la normalización del clima. La reducción se presentó tanto en alimentos procesados como en los perecederos, destacándose los precios de la carne y la papa. La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, se situó en 5,56%, frente a 5,45% en el mes anterior. Desde octubre del año pasado este indicador ha presentado una tendencia al alza de manera ininterrumpida. Se destaca el rubro de arriendos que en el mes de agosto se incrementó, situándose en 4,9%. En el último mes se presentó una caída en la inflación de transables sin alimentos ni regulados. Aunque en agosto se mantuvo estable la inflación de regulados (6,6%), los resultados se ubicaron por encima de lo esperado. b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras En cuanto al crecimiento económico interno, la información disponible continúa mostrando que mantiene una dinámica fuerte. El DANE informó que el PIB aumentó el segundo trimestre del año en 6,87% impulsado por la inversión y la aceleración del 2 consumo de las familias. Para lo que resta del año se prevé un comportamiento positivo, como lo sugieren el crecimiento de la industria en julio y los buenos resultados del indicador de confianza de los consumidores. Durante el segundo trimestre se estabilizó el crecimiento de las exportaciones totales alrededor del 15%. Entre abril y junio las exportaciones tradicionales han crecido en promedio 12,8% mientras que las no tradicionales alcanzaron a junio un crecimiento anual de 21,8%. Se destaca que las exportaciones a los Estados Unidos han disminuido, lo cual ha sido compensado parcialmente por aumentos a Venezuela y a otros países. Con cifras a agosto, las importaciones mantuvieron un ritmo de crecimiento alto (26,8% frente al período enero agosto de 2006), aunque se evidencia un dinamismo menor al de los primeros meses del año (30% para el período enero-abril). La desaceleración es particularmente notoria en las importaciones de bienes de capital y bienes de consumo. Contexto internacional En el ámbito externo, los mercados continúan mostrando una alta incertidumbre como consecuencia de la crisis hipotecaria en los Estados Unidos. Dicha situación aumentó la percepción de riesgo a nivel mundial y generó restricciones en la liquidez en varios mercados, lo que motivó la intervención de algunos bancos centrales. El Banco de la Reserva Federal de los Estados Unidos redujo su tasa de política en 50 p.b., dejándola en 4,75%, en procura de moderar el impacto de la caída en el precio de la vivienda en ese país. Los efectos de los cambios recientes en la coyuntura internacional sobre la economía colombiana son inciertos. Por un lado, el riesgo de que la turbulencia financiera se traduzca en un menor crecimiento en los Estados Unidos ha aumentado, si bien los analistas internacionales no vislumbran una recesión en ese país. Por otra parte, los precios de varios productos básicos de exportación de Colombia, tales como el petróleo y el café, han aumentado recientemente, lo que puede tener efectos expansivos sobre la demanda agregada. Adicionalmente, el aumento en el precio de algunos bienes agrícolas importados como el trigo puede generar presiones inflacionarias. Variables Financieras Los agregados monetarios continuaron desacelerándose en agosto como resultado de un menor ritmo de crecimiento del efectivo. Respecto a los pasivos sujetos a encaje (PSE), su ritmo de expansión también se ha moderado aunque su dinámica sigue siendo alta y se mantiene la recuperación relativa de los CDT frente a las cuentas corrientes. El crédito también se desaceleró nuevamente en agosto. La cartera bruta total en moneda nacional creció a un ritmo anual de 24%, inferior en 145 puntos básicos a la registrada el mes anterior. La moderación en el crecimiento se observó en todos los 3 tipos de crédito excepto en el hipotecario, el cual continúa ganando impulso: su crecimiento anual pasó de 19% en julio a 19,8% en agosto. La tasa de interés interbancaria (TIB) se mantuvo levemente por encima de la tasa de intervención del Banco. Aunque esta última se mantuvo inalterada, las tasas de interés de los CDT y las tasas promedio de colocación aumentaron en el mes de agosto. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) a pesar de la notable reducción en el ritmo anual de inflación que se observó en agosto, el ritmo anual de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco; (ii) la apreciación del peso se ha reflejado de manera limitada en los precios de los bienes transables; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, sigue mostrando una tendencia al alza; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles muy altos; y (v) las expectativas de inflación se han reducido pero todavía se sitúan por encima de las metas establecidas por el Banco. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que las medidas de política monetaria adoptadas (aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes) han moderado el crecimiento de los agregados monetarios y la dinámica del crédito. Por otra parte, se destacó que los factores que explican la alta tasa de crecimiento de la economía continúan vigentes. La demanda externa continúa fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables, destacándose en las últimas semanas aumentos en los precios del petróleo y del café, y el crédito sigue creciendo a tasas elevadas. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada continúa expandiéndose rápidamente, impulsando el crecimiento de corto plazo de la economía. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) la incertidumbre sobre el comportamiento inflacionario para lo que resta del año; (iii) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, el que cambios en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (iv) el impacto del crecimiento en la brecha del producto; y (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana. La Junta de manera unánime consideró oportuno mantener la pausa en el incremento de sus tasas de interés de intervención con el fin de obtener mayor información para evaluar las posibles consecuencias que podrían presentarse por la crisis externa y los efectos de la política monetaria sobre la demanda agregada y las perspectivas inflacionarias. Se destacó que dado el contexto internacional existe un alto grado de incertidumbre en las proyecciones de inflación y crecimiento económico. Por una parte, existe la posibilidad de que el crecimiento de la demanda interna retorne más lentamente de lo esperado a tasas que sean coherentes con el logro de las metas de 4 inflación y unas cuentas externas sostenibles, lo que llevaría a futuros aumentos en la tasa de intervención. Por otra, la solución de la crisis del mercado hipotecario en los Estados Unidos puede ser más lenta y tener mayor efecto en el crecimiento de la economía mundial que lo inicialmente previsto. Para la economía colombiana esto puede afectar la demanda, los precios de los productos de exportación y el acceso futuro al mercado internacional de capitales. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., octubre 5 de 2007
2007-10-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 26 de octubre de 2007 El 26 de octubre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo Galarza y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor se redujo en septiembre, por quinto mes consecutivo, cerrando en 5,01%, inferior a lo que se esperaba y 21 puntos básicos por debajo de la del mes anterior. Este comportamiento también se observó en todos los indicadores de inflación básica. Como se preveía, luego del choque negativo de oferta generado por el fenómeno del Niño, la inflación anual de alimentos continuó disminuyendo y explica en buena parte la caída de la inflación. La reducción se presentó tanto en alimentos procesados como en los perecederos. La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, se situó en 5,55%, cifra similar a la del mes anterior. Se destaca, sin embargo, que este indicador sigue sin mostrar una tendencia descendente. En el último mes se presentó una caída en la inflación de transables sin alimentos ni regulados acorde con el comportamiento de la tasa de cambio. Por su parte, el índice de precios al productor (IPP) total mostró, por cuarto mes consecutivo, un crecimiento anual negativo (0,91%), lo cual también ha influido en la inflación de regulados. b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. Aunque, el crecimiento del PIB estimado para el segundo trimestre (6,9%) fue menor al del 2 primer trimestre (8,1%), la información disponible permite prever que el resultado a final del año será similar al del año anterior. Las cifras de empleo del periodo junio a agosto muestran que la tasa de desempleo de las 13 principales áreas metropolitanas se ubicó en 11%, cifra inferior en 1,5 puntos porcentuales a la observada en el mismo trimestre del año anterior. Otros indicadores disponibles del mercado laboral indican que el empleo en la industria y comercio siguen creciendo, como lo señala el registro de julio con variaciones anuales de 2,9% y 6,2%, respectivamente. El dinamismo de las exportaciones (crecimiento de 15,3% en dólares) se explica en gran parte por las mayores ventas de productos no tradicionales que aportaron cerca del 64% del incremento del valor exportado. Venezuela continúa siendo el socio de mayor crecimiento con un aumento anual de exportaciones acumuladas entre enero y julio de 73,1%. En el mismo periodo las exportaciones hacia Estados Unidos se redujeron en 6,4%. Por su parte, las importaciones mantuvieron un ritmo de crecimiento alto, aunque se evidencia un dinamismo menor al de los primeros meses del año, particularmente en lo que hace referencia a bienes de capital y bienes de consumo. Contexto internacional En los mercados financieros mundiales continúa la incertidumbre sobre el tamaño y la duración de la recesión en el mercado de vivienda norteamericano y su impacto sobre el crecimiento de las economías desarrolladas. Las estimaciones de crecimiento económico de algunos de nuestros principales socios comerciales han sido revisadas a la baja. Por otra parte, se espera que los precios de la mayoría de los productos básicos de exportación continúen en niveles altos, lo cual permitiría mantener unos términos de intercambio favorables. Variables Financieras El ritmo de crecimiento de los agregados monetarios ha venido registrando una tendencia descendente, a pesar de que ésta no se observó en el mes de septiembre. La variación anual del M3, la base monetaria y el efectivo fueron en su orden: 16,4%, 11,8% y 8,1%. Los pasivos sujetos a encaje mantuvieron la recuperación relativa de los CDT frente a las cuentas corrientes. En septiembre, el crédito mantuvo un crecimiento anual de 27%, cifra superior a la presentada en agosto. La cartera de consumo creció 39,4% anual con un ligero descenso frente a la del mes anterior. Por el contrario, el crecimiento de la cartera comercial mostró un repunte de 20,5% a 22,2% y la cartera hipotecaria mantuvo su ritmo de crecimiento anual en 19,2%. 3 La tasa de interés interbancaria (TIB) se ubicó levemente por encima de la tasa de intervención del Banco de la República. En términos reales, las tasas de interés DTF y de colocación mostraron un incremento importante en el tercer trimestre. Aunque si se comparan con las que han predominado durante períodos más recientes de más baja inflación, sus niveles resultarían superiores. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) a pesar de la notable reducción en la inflación anual a septiembre, el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en la reducción reciente de la inflación; (iii) la apreciación del peso se ha reflejado de manera limitada en los precios de los bienes transables; (iv) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, sigue sin mostrar una tendencia descendente; (v) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos; y (vi) las expectativas de inflación se han reducido pero todavía se sitúan por encima de las metas establecidas. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que las medidas de política monetaria adoptadas (aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes) han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar el crecimiento de los agregados monetarios y la dinámica del crédito. En los últimos meses dichas medidas han fortalecido los canales de transmisión de la política monetaria, generando incrementos importantes en las tasas de interés activas, lo cual las ha llevado a niveles más coherentes con una moderación de la demanda agregada. A pesar de ello, se destacó que en el último mes se registró un aumento en algunas componentes del crédito y de las tasas de crecimiento de los agregados monetarios. Por otra parte, la demanda externa sigue fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables e, incluso, han mejorado recientemente, y el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada continúa expandiéndose. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para lo que resta del año y el 2008; (iii) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, el que cambios en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (iv) el impacto de la brecha del producto sobre los precios; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; y (vi) la posible desaceleración del crecimiento de la demanda agregada como efecto de las medidas de política monetaria hasta ahora aplicadas. La Junta de manera unánime consideró oportuno mantener la pausa en el incremento de sus tasas de interés de intervención con el fin de obtener mayor información para evaluar las consecuencias que podrían presentarse por la crisis externa y los efectos remanentes de la política monetaria sobre la demanda agregada y las 4 perspectivas inflacionarias. Se destacó, que dado el contexto internacional, existe un alto grado de incertidumbre en las proyecciones de inflación y crecimiento económico. Por una parte, existe la posibilidad de que el crecimiento de la demanda interna retorne más lentamente de lo esperado a tasas que sean coherentes con el logro de las metas de inflación y unas cuentas externas sostenibles, lo que podría llevar a futuros aumentos en la tasa de intervención. Por otra, la solución de la crisis del mercado hipotecario en los Estados Unidos puede ser más lenta y tener mayor efecto en el crecimiento de la economía mundial que lo inicialmente previsto. Para la economía colombiana esto tendría efectos sobre la demanda, los precios de los productos de exportación y el acceso futuro al mercado internacional de capitales. La Junta destacó que con una inflación y expectativas de inflación ancladas en las metas de mediano y largo plazo, la autoridad monetaria tendría mayores grados de libertad para ejecutar una política anticíclica en caso de que, en el futuro, se presente un escenario desfavorable para la economía colombiana. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., noviembre 9 de 2007
2007-11-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 23 de noviembre de 2007 El 23 de noviembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo Galarza y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación En el mes de octubre, el índice de precios al consumidor se mantuvo prácticamente inalterado, con una variación de 0,01%. Sin embargo, debido a la caída que se había presentado en ese índice en octubre de 2006, la inflación anual interrumpió la tendencia decreciente que traía desde mayo, cerrando en 5,16%, 15 puntos básicos por encima del dato de septiembre. Este aumento de la inflación se concentró en la inflación sin alimentos, en especial en los bienes transables y, en menor medida, en los regulados. Este comportamiento también se observó en la mayoría de los indicadores de inflación básica. La variación anual de los precios de los alimentos, que venía cayendo desde abril de este año, dejó de hacerlo en octubre y se mantuvo en 7%. La inflación de los alimentos perecederos continuó disminuyendo, pero la de alimentos procesados aumentó levemente. El incremento en los precios de los cereales y oleaginosas, vinculados con los precios internacionales y la tasa de cambio, fue la principal causa para que se diera una interrupción de la tendencia decreciente. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se redujo a 5,3%, cifra inferior en 26 puntos básicos a la del mes anterior. Se destaca la caída de arriendos por segundo mes consecutivo y del subgrupo de diversión cultura y esparcimiento. 2 En octubre se presentó un aumento en la inflación anual de transables diferentes de alimentos como consecuencia de una base de comparación muy baja en el mismo mes del año pasado, cuando se efectuaron importantes rebajas en las tarifas de telefonía. Los precios de los regulados también contribuyeron a acelerar la inflación anual en octubre, destacándose incrementos en servicios públicos, como gas domiciliario y, en menor medida, energía. b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica, aunque alguna información disponible sugiere que se está moderando. Los indicadores sobre crecimiento industrial muestran una desaceleración paulatina desde el primer trimestre. Las ventas al por menor según el DANE crecieron en términos reales 9,4% en septiembre, cifra similar a la observada desde el segundo trimestre del año pero inferior a la del mismo mes del 2006. Por su parte, el indicador de confianza de los consumidores sigue presentando niveles similares a los de la misma fecha del año pasado. Todo lo anterior es consistente con los pronósticos de crecimiento del PIB que se divulgaron en el Informe sobre Inflación del Banco de la República correspondiente a Septiembre del 2007, en los cuales se suponía que el dinamismo del segundo semestre sería inferior al de la primera mitad del año. Las exportaciones a agosto siguieron creciendo a un ritmo alto y similar al de meses anteriores (de 16% en dólares), en gran parte por las mayores ventas de productos no tradicionales. Venezuela continúa siendo el mercado de mayor crecimiento y ha compensado en el mismo periodo la caída en las exportaciones hacia Estados Unidos. Contexto internacional Se mantiene la incertidumbre sobre la magnitud y la duración de la recesión en el mercado de vivienda norteamericano y su impacto sobre el crecimiento de la economía mundial. Varios indicadores líderes sugieren que la economía norteamericana se estaría debilitando, lo que se une a la persistencia de los problemas que muestra el sector hipotecario y varias entidades financieras. El consumo privado podría estar resintiéndose, en parte por los aumentos en el precio de los combustibles, pero también por la disminución en los precios de los activos (finca raíz y acciones). A las señales de desaceleración se suma el surgimiento de nuevas presiones inflacionarias por los altos precios del petróleo y de los alimentos. Por otra parte, se espera que los precios internacionales de la mayoría de los productos básicos de exportación continúen en niveles altos, lo cual permitiría mantener unos términos de intercambio favorables para Colombia. 3 Variables Financieras Las principales variables monetarias observaron un aumento en octubre. Se destaca el crecimiento de M3 a una tasa anual de 17,3%, mayor que la de agosto (15,7%) y por encima del crecimiento del PIB nominal. Por su parte, el crecimiento anual de la cartera total del sistema financiero en moneda legal continuó desacelerándose frente al último mes, pasando de 27% en septiembre a 25% en octubre. Este fenómeno se observó en especial en la cartera de consumo, que pasó de crecer 39,4% en septiembre a 36,7% en octubre. Las carteras comercial e hipotecaria también perdieron dinamismo pero en menor medida. Para octubre se expandieron a tasas de 20,3% y 18,8% frente a tasas de 22,2% y 19,2% en el mes anterior, respectivamente. En octubre, aumentaron las tasas nominales de ahorro y de crédito de consumo y de tarjetas. Las demás tasas disminuyeron, sobresaliendo el descenso de la DTF (en 30 puntos básicos) y la de crédito ordinario (en 24 puntos básicos). 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento futuro de inflación; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, que en el mes de octubre se redujo pero sigue por encima de la inflación total; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación (Venezuela y Estados Unidos); y (vi) las implicaciones para la política monetaria de las metas de inflación fijadas por la Junta y del comportamiento de las expectativas de inflación frente a esas metas. La Junta consideró que, a pesar de los resultados de octubre, distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar el crecimiento de la demanda agregada y la dinámica del crédito. En los últimos meses dichas medidas han fortalecido los canales de transmisión de la política monetaria, lo cual ha llevado las tasas de interés hacia niveles más coherentes con aquellos objetivos. A manera de ejemplo, entre mayo de 2006 y octubre de 2007, la DTF aumentó de 5,97% a 8,59%, y la tasa activa promedio de 12,89% a 17,24%. 4 Por otra parte, la demanda externa sigue fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables e, incluso, han mejorado recientemente, y el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para lo que resta del año y el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda superior al de la producción nacional; (iv) el que cambios en el escenario internacional puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio en un contexto de fuerte crecimiento de la demanda interna; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de precios que vienen enfrentando cada vez más otros países. La Junta de manera unánime juzgó que el logro de las metas de inflación establecidas para el 2008 (rango entre 3,5% y 4,5%, con 4% como meta puntual para efectos legales) y el 2009 (meta puntual entre 3% y 3,5%) requerían de un ajuste adicional en las tasas de interés de intervención. Por tal razón, decidió incrementar en 25 p.b. sus tasas de intervención de 9,25% a 9,50%. Lo anterior teniendo en cuenta un entorno caracterizado por un crecimiento aún fuerte de la demanda agregada y el crédito, alta utilización de la capacidad instalada y un contexto internacional de desaceleración moderada de la economía mundial. Sobre el particular, algunos directores señalaron que el nuevo nivel de tasa de interés es consistente con una política monetaria contraccionista a la manera de ‘seguro’ que selle la credibilidad del mercado y ancle sus expectativas en el cumplimiento de las metas de inflación fijadas para 2008 y 2009. Que después del nuevo aumento de 25 puntos básicos las necesidades de incrementos adicionales desaparecen. Y que, dependiendo del comportamiento de los niveles internos de precios y del empleo, y de la evolución de las condiciones externas, en especial de Estados Unidos y Venezuela, eventualmente se podría regresar a una postura más neutral. Otros directores manifestaron que resulta muy difícil predecir decisiones futuras sobre la senda de tasas de interés de intervención y consideraron que no se pueden descartar incrementos adicionales si la información que se reciba en los meses venideros sugiere que ello es aconsejable para garantizar el cumplimiento de las metas de inflación establecidas y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible. Por esta razón, la Junta estará atenta a la nueva información y sus implicaciones sobre la inflación proyectada. Con la información disponible, los miembros de la Junta consideran que el 9,50% de tasa de interés se encuentra alrededor del nivel coherente con el logro de las metas de inflación anunciadas. Adicionalmente, estima que este nivel de tasa sería consistente con el máximo crecimiento sostenible de la economía. 5 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad aumentar en 25 puntos básicos de 9,25% a 9,50% las tasas de intervención del Banco de la República Bogotá D.C., diciembre 7 de 2007
2007-12-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 14 de diciembre de 2007 El 14 de diciembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes Desarrollos recientes de la inflación En noviembre, la variación anual del índice de precios al consumidor se situó en 5,41%, veinticinco puntos básicos por encima del resultado de octubre (5,16%). El aumento se concentró en los precios de los alimentos y, en menor medida, de los bienes transables y los regulados, en particular las tarifas de energía y los precios de los combustibles. Este comportamiento también se observó en la mayoría de los indicadores de inflación básica. La variación anual de los precios de los alimentos se debió al fuerte aumento tanto en alimentos perecederos como en procesados. Se destaca el incremento de las hortalizas, como consecuencia del invierno, y de los cereales y aceites, estrechamente vinculado con el comportamiento de los precios internacionales. La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados se redujo a 5,27% desde un nivel de 5,33% en octubre. Se destaca la caída por tercer mes consecutivo del rubro de arriendos y del subgrupo de servicios bancarios, que compensó el aumento en diversión, cultura y esparcimiento. Crecimiento, contexto externo y variables financieras El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. La poca información nueva disponible, como el indicador de confianza de los consumidores y las cifras del mercado laboral, es consistente con los pronósticos de crecimiento del PIB que se divulgaron en el Informe de Inflación del Banco de la 2 República. En dicho informe, correspondiente a septiembre de 2007, se indica que el dinamismo del segundo semestre sería inferior al de la primera mitad del año. Las exportaciones continuaron creciendo a un buen ritmo. En lo corrido del año hasta agosto, las ventas totales al exterior en dólares aumentaron 18,5% anual. Las de mayor dinamismo fueron las destinadas a Venezuela con un incremento del 76,8%, con lo cual ese mercado representó el 14,9% del total de las exportaciones colombianas. Contexto internacional En el último mes se mantuvo la incertidumbre sobre la magnitud y duración de la recesión en el mercado de vivienda norteamericano y su impacto sobre el crecimiento de la economía mundial. Varios indicadores líderes de la industria y de sectores no industriales sugieren que la economía de los Estados Unidos se estaría debilitando, lo que se une a la persistencia de los problemas que muestran el sector hipotecario y varias entidades financieras. La Reserva Federal redujo su tasa de referencia en 25 p.b. en su reunión del 11 de diciembre y, conjuntamente con otros Bancos Centrales ofreció una mayor liquidez al mercado con el fin de atenuar los problemas de liquidez de algunas entidades financieras. Estas dudas sobre la economía norteamericana han extendido los temores de desaceleración a otras economías desarrolladas, a lo que se suma el surgimiento de nuevas presiones inflacionarias por los altos precios del petróleo y de los alimentos y la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de las exportaciones colombianas a Venezuela. Por otra parte, se espera que los precios de la mayoría de los productos básicos de exportación continúen en niveles altos, lo cual permitiría mantener unos términos de intercambio favorables para Colombia. Variables Financieras La cartera bruta total en moneda legal del sistema financiero continuó moderando su ritmo de crecimiento, al pasar de incrementos anuales de 25,1% en octubre a 24,1% en noviembre. Igual dinámica se observó en la cartera de consumo, con tasas anuales de 36,7% y 35% para las mismas fechas. Las carteras comercial e hipotecaria también perdieron dinamismo, aunque en menor medida. Para noviembre se expandieron en 19,6% y 17,8%, frente a tasas de 20,3% y 18,3% en el mes anterior, respectivamente. 3 En noviembre las tasas de interés pasivas volvieron a mostrar una tendencia ascendente, en particular la tasa promedio de los CDT. La tasa activa promedio se redujo en 11 p.b frente al mes anterior situándose en 16,7%. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de la inflación en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados, que siguió reduciéndose pero sigue por encima de niveles compatibles con las metas establecidas; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular de Venezuela; y (vi) las implicaciones para la política monetaria de las metas de inflación fijadas por la Junta y del comportamiento de las expectativas de inflación frente a esas metas. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. En los últimos meses se han fortalecido los canales de transmisión de la política monetaria. En todo caso, el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante. Por otra parte, la demanda externa continúa fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables e, incluso, siguen mejorando. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (iv) el que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen enfrentando los países. Los miembros de la Junta resaltaron que la actual coyuntura se caracteriza por una gran incertidumbre, lo cual hace difícil predecir decisiones sobre la tasa de interés de intervención. Algunos de los directores destacaron que, a pesar de las medidas de política adoptadas a lo largo del año, la inflación sigue mostrando una preocupante tendencia al alza que la aleja de la meta de largo plazo definida en la sesión anterior, lo cual se ha manifestado parcialmente en el comportamiento de las expectativas. Al mismo tiempo, no descartaron que en el futuro sean necesarios incrementos adicionales si la 4 información sugiere que ello es aconsejable para garantizar el cumplimiento de las metas de inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible. Otros miembros reiteraron su postura planteada durante la reunión de la Junta del 23 de noviembre pasado, en el sentido de que la tasa de interés vigente es consistente con una política monetaria contraccionista. Por tanto, destacaron que la información disponible no sugiere la necesidad de aumentos futuros en la tasa de intervención; que la política monetaria viene logrando los objetivos buscados para moderar el crecimiento y el crédito y anclar las expectativas hacia el logro de las metas de inflación; y que, dependiendo de la evolución de las condiciones externas y de los niveles internos de precios y empleo, cabría regresar a una postura más neutral. La Junta, de manera unánime, mantuvo inalterada su tasa de intervención en 9,50% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., diciembre 28 de 2007
2008-01-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de enero de 2008 El 25 de enero de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. El director Fernando Tenjo no estuvo presente. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación al consumidor cerró el año en 5,69%, 119 p.b. por encima del techo del rango meta fijado por la Junta Directiva del Banco de la República y mayor en 121 p.b. al resultado de diciembre de 2006. El aumento de la inflación en diciembre se explica fundamentalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos y de los regulados. En el mes, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados no aumentó y se situó en 5,2%, cayendo por cuarto mes consecutivo luego de haber alcanzado un máximo de 5,57% en agosto. El promedio de los indicadores de la inflación básica al final del año se situó alrededor del 5%. En el caso específico de la inflación sin alimentos, el resultado de diciembre de 2007 fue 4,4%, similar al de noviembre. En lo que se refiere a los alimentos, la variación anual de sus precios (8,51%) se explica por diversos factores. Por una parte, fenómenos climáticos como El Niño en los primeros meses del año y la Niña en el segundo semestre de 2007 impactaron el abastecimiento de varios alimentos (hortalizas, frutas y tubérculos). Por otra, la mayor demanda y producción de biocombustibles presionó los precios internacionales de algunos alimentos e insumos agrícolas, mientras que los altos precios del petróleo incrementaron los fletes del transporte y los precios de varios agroquímicos. Adicionalmente, esta situación ha inducido el desplazamiento de materias primas agrícolas, antes destinadas a alimentos, para su utilización en la elaboración de biocombustibles. Finalmente, el aumento de la demanda de Venezuela por algunos alimentos y la fortaleza de la demanda interna también presionaron los precios al alza. 2 b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. El crecimiento anual registrado para el PIB en el tercer trimestre de 2007 fue de 6,6%. Con esta nueva información se corrobora que el crecimiento para todo el año estará alrededor del 7,0% Para 2008 se prevé una desaceleración cuya magnitud dependerá de la situación internacional. A pesar de ello, estudios técnicos del Banco muestran que el crecimiento del PIB para este año se mantendrá vigoroso, alrededor del promedio del último lustro. Lo anterior es consistente con el buen desempeño de las exportaciones, que continúan creciendo a un buen ritmo, de la inversión y del dinamismo en el empleo. En el comercio, de acuerdo con la encuesta sectorial, el empleo a noviembre creció a una tasa del 6,7% anual y completó 2 años expandiéndose por encima del 5% anual. El empleo en la industria, aunque con registros menos altos, también completó seis trimestres creciendo a tasas superiores al 2%, mostrando en noviembre un crecimiento del 2,5% anual. c. Contexto internacional Distintos indicadores confirman la desaceleración de la economía norteamericana. El mercado de vivienda no muestra señales de recuperación, las restricciones crediticias han aumentado y las ventas, los permisos de construcción y el desarrollo de nuevos proyectos habitacionales continúan deteriorándose. Ello permite esperar caídas mayores en los precios de la vivienda en los próximos meses e implicaciones importantes sobre la solidez financiera de ese país y de otros países desarrollados. Adicionalmente, a diciembre la tasa de desempleo aumentó de 4,7% a 5% y la generación de empleo se desaceleró sustancialmente, algo que no sucedía desde la anterior recesión en 2001. Así mismo, las expectativas de producción para la industria obtenidas de encuestas se han reducido a niveles que no se observaban desde 2001. El consumo de los hogares, que hasta hace poco mostraba una gran solidez, podría estar resintiéndose a juzgar por la contracción de las ventas al por menor en diciembre (-4,3% mensual anualizado) y por el comportamiento de las encuestas de consumo. Estas dudas sobre la economía norteamericana han extendido los temores de desaceleración a otras economías desarrolladas y en desarrollo, a lo que se suma el surgimiento de nuevas presiones inflacionarias por los altos precios del petróleo y de los alimentos y la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de las exportaciones colombianas a Venezuela. d. Variables financieras La base monetaria cerró el año con un crecimiento de 19,4% frente a 15,3% en noviembre y 10,9% un trimestre atrás. La tendencia de la base guarda relación con la recuperación de la demanda por efectivo y con una mayor demanda por reserva bancaria 3 asociada con el aumento del encaje marginal a mediados del 2007. Por su parte, el M3 creció en diciembre a una tasa anual de 17,8%, también mayor que la observada en meses anteriores. Se destaca un aumento en la participación de los CDT en detrimento de las cuentas de ahorro. En el mismo período, el crecimiento de la cartera del sistema financiero continuó moderándose y a diciembre era de 23,6%. El crédito comercial muestra signos de aceleración confirmados por los mayores desembolsos. Parte de este aumento podría ser explicado por la sustitución de créditos externos por crédito interno a raíz del restablecimiento de los depósitos sobre endeudamiento externo. Por su parte, el crecimiento anual del crédito de consumo y de la cartera total se redujo. En el mes de diciembre las tasas pasivas, excepto la DTF, tendieron a disminuir y algo similar sucedió con las tasas activas de consumo, comercial y microcrédito, y con el promedio de la tasa activa. Con ese comportamiento de las tasas nominales y dado el aumento de la inflación de los últimos meses, las tasas reales tendieron a reducirse en el cuarto trimestre, interrumpiendo la tendencia ascendente que se observaba desde comienzos de 2007. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de la inflación en el 2008 y 2009 en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que, si bien siguió reduciéndose, continúa por encima de niveles compatibles con las metas establecidas; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular de Venezuela y (vi) las implicaciones para la política monetaria de las metas de inflación fijadas por la Junta y del comportamiento de las expectativas de inflación las cuales aumentaron en el último mes por el resultado de la inflación en el 2007. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. En todo caso, el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (iv) el que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a 4 ajustes futuros en la tasa de cambio; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen enfrentando los países. Los miembros de la Junta resaltaron de manera unánime que la actual coyuntura se caracteriza por una gran incertidumbre. En especial, las posibles implicaciones en el crecimiento de la economía colombiana por un menor crecimiento de la economía mundial aconsejan que sea mejor esperar a nueva información antes de tomar decisiones sobre la tasa de interés de intervención. En efecto, este menor crecimiento de la economía mundial podría afectar el desempeño de la economía colombiana, lo cual dependerá de la magnitud de la desaceleración en esos países y su incidencia sobre las exportaciones, los precios de los bienes básicos, los flujos de capital y las remesas. Algunos de los directores destacaron que la inflación sigue mostrando una preocupante tendencia al alza que la aleja de la meta de largo plazo definida en la sesión anterior, lo cual se ha manifestado en el comportamiento de las expectativas. Al mismo tiempo, no descartaron que en el futuro sean necesarios incrementos adicionales en la tasa de intervención si la información sugiere que ello es aconsejable para garantizar el cumplimiento de las metas de inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible. Otros miembros reiteraron que la tasa de interés vigente es consistente con una política monetaria contraccionista y que la información disponible no sugiere la necesidad de aumentos futuros en la tasa de intervención. A su juicio, la política monetaria viene logrando los objetivos buscados para moderar el crecimiento y el crédito y anclar las expectativas hacia el logro de las metas de inflación. Dependiendo de la evolución de las condiciones externas y de los niveles internos de precios y empleo, cabría regresar a una postura más neutral. La Junta de manera unánime mantuvo inalterada su tasa de intervención en 9,50% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., febrero 8 de 2008
2008-02-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 22 de febrero de 2008 El 22 de Febrero de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual en enero aumentó por cuarto mes consecutivo al cerrar en 6,0%. Este nivel supera en 31 p.b. el registro del mes anterior y en 150 p.b. el rango superior de la meta para 2008. El aumento de la inflación en enero se explica fundamentalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos. En el mes, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable alrededor de 5,2%. Los distintos indicadores de inflación básica se mantuvieron alrededor de 5%. El indicador de inflación sin alimentos aumentó de 4,4% en diciembre a 4,5% en enero. Respecto a los alimentos, el grupo de perecederos, encabezados por la papa, hortalizas y huevos, fue responsable del fuerte aumento de la inflación en enero. La inflación de procesados, por su parte, se contrajo levemente. A pesar de ello, la inflación anual de este subgrupo continúa exhibiendo un alto nivel (9,7%). Los procesados estarían siendo afectados por los precios internacionales altos, los cuales a su vez han sido golpeados 2 por el desplazamiento de la oferta agrícola hacia la producción de biocombustibles y por la gran demanda de China, la India y de otras economías emergentes. b. Crecimiento interno El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica, lo que permite mantener las estimaciones realizadas por el equipo técnico del Banco que sitúan el crecimiento del PIB alrededor del 7% en el 2007 y del 5% para el 2008. Las cifras de producción industrial arrojaron un crecimiento alto, de 7,7% en promedio entre octubre y noviembre, aunque menor que el observado en el tercer trimestre (8,5%). Algo similar se observa en el crecimiento de las ventas del comercio al por menor. Por su parte, el indicador de confianza del consumidor de la encuesta de Fedesarrollo se situó en el último trimestre de 2007 en niveles históricamente altos. Las importaciones crecieron 24,5%, sobresaliendo la aceleración de las de bienes de capital. Esto sugiere que la inversión conservó una dinámica importante hacia finales de año. En el caso de las importaciones de bienes de consumo, su crecimiento fue 28,4%, pero con una ligera desaceleración desde abril de 2007. Las exportaciones tradicionales y no tradicionales, continuaron creciendo en octubre y noviembre. En el caso de las tradicionales, su dinámica obedece a un aumento en los precios internacionales, mientras que en las no tradicionales sobresale el dinamismo que exhibieron las ventas a Venezuela, las cuales crecieron a un ritmo anual de 84%, frente a 70% a finales del tercer trimestre (acumulado a 12 meses). Las exportaciones no tradicionales a Venezuela ya representan el 8,44% del PIB. c. Contexto internacional En enero y lo corrido de febrero, las noticias sobre la economía de EEUU apoyan los menores pronósticos de crecimiento. En efecto, la generación de empleo fue negativa en enero, por primera vez desde 3 mediados de 2003. El indicador líder del sector de servicios sufrió un retroceso importante en ese mismo mes, algo que no se veía desde el anterior período recesivo en 2001, mientras que el sentimiento de los consumidores cayó en febrero a niveles no vistos desde comienzos de la década pasada. Por otro lado, las cifras para el mercado de vivienda a noviembre de 2007 sugieren que el deterioro se acentuó a finales del año pasado. Respecto a las tasas de interés de la FED, el mercado espera reducciones en los próximos meses de alrededor de 75 p.b., lo que situaría la tasa de referencia sobre los fondos federales en junio en 2,25%, aproximadamente. No obstante, el dato relativamente alto de inflación básica al consumidor para enero en EEUU (2,5% en términos anuales) podría frenar en algo estas disminuciones. El menor crecimiento en EEUU aún no ha tenido efectos evidentes en la demanda mundial ni en los precios de las materias primas. De hecho, estos últimos continuaron aumentando a comienzos de año y se sitúan en niveles máximos históricos. Los aumentos han sido significativos en el caso de los productos agrícolas, incluido el café, y en otros bienes exportados por Colombia como carbón y oro. c. Variables Financieras Desde septiembre, el M3 crece alrededor de 18%. Se desataca la aceleración de las captaciones a través de CDT, que en enero crecían a una tasa cercana al 35%. El crecimiento de la cartera del sistema financiero continuó desacelerándose. En enero, el crédito total creció a una tasa anual de 23,5%, menor que la de diciembre (24,5%) y que la de septiembre (28,2%), aunque todavía por encima del crecimiento esperado del PIB nominal. El crédito de consumo es el que más rápidamente se ha desacelerado en los últimos seis meses, aunque su ritmo sigue siendo el más alto (31% aproximadamente). La tasa de interés interbancaria (TIB) se mantuvo alrededor de 9,40%, ligeramente por debajo de la tasa de referencia del Banco de la República. La mayoría de las otras tasas nominales tendieron a aumentar en 4 enero, destacándose lo sucedido con las de tarjetas de crédito, las de crédito de consumo y las de crédito ordinario. Si bien el diferencial de las tasas de interés de la FED y las tasas del BR se han incrementado en 125 p.b., la caída de las tasas de interés relativas en los Estados Unidos fue compensada por el aumento de la prima de riesgo colombiana. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de la inflación en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados frenó la tendencia descendente que traía en meses anteriores; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular de Venezuela, y; (vi) el comportamiento de las expectativas de inflación, las cuales aumentaron en el último mes ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. En todo caso, el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque desacelerándose. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria, dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008; (iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (iv) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (v) el que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vi) la incertidumbre 5 generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana, y; (vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen enfrentando los países. La mayoría de la Junta consideró necesario elevar en 25 p.b. las tasas de interés de intervención para garantizar el cumplimiento de las metas de inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible, teniendo en cuenta los siguientes elementos: (i) Si bien la demanda agregada ha moderado su ritmo de crecimiento gracias a las decisiones de política monetaria, la información disponible muestra que continúa fuerte. Lo mismo sucede con el crecimiento del crédito que, aunque muestra una tendencia decreciente, sigue estando por encima de sus promedios históricos; (ii) los distintos indicadores de expectativas de inflación a horizontes de uno y más años muestran que estas han aumentado en los últimos meses haciendo más costosa la reducción futura de la inflación; (iii) los altos incrementos en los precios de los alimentos y combustibles pueden ser persistentes manteniendo la inflación total en niveles elevados, más aún cuando algunas alzas internas podrían aún no haberse incorporado al comportamiento de los precios internos; (iv) no hay aún evidencia de que la desaceleración de la economía en Estados Unidos y Europa haya afectado la economía colombiana. Los términos de intercambio se encuentran en niveles históricamente altos, los flujos comerciales mantienen su dinámica positiva y la confianza de los inversionistas internacionales se refleja en los crecientes flujos de inversión extranjera directa; (v) las entradas netas de capital de la balanza de cambiaria se explican por la dinámica de inversión extranjera directa y no por flujos de capital de corto plazo inducidos por diferenciales de tasas de interés entre Colombia y el exterior, y; (vi) el aumento de la tasa de intervención apuntala la credibilidad de la política monetaria y facilita la política anticíclica en el futuro. Otros miembros de la Junta, por el contrario, estimaron que no debía aumentarse la tasa de interés de intervención por las siguientes razones: (i) Como resultado de los reajustes de la tasa de intervención del Banco, uno de los más altos de toda la región en los últimos dos años, las tasas de interés de colocación también han subido, y subirán aún más a lo largo de este año por los efectos remanentes del rezago natural entre las medidas tomadas y sus impactos, entre año y medio y dos años; (ii) inclusive según los modelos, aunque la brecha del producto es positiva desde hace dos años, ha comenzado a corregirse por efecto de las alzas en las tasas de interés; (iii) la economía colombiana se encuentra afrontando los efectos de un choque externo muy severo de precios de alimentos y combustibles, lo 6 que se refleja en las expectativas de inflación; (vi) la economía en 2008 se desaceleraría a una tasa de crecimiento del 5%, suponiendo un crecimiento de la norteamericana del 0,8%. Sin embargo, pronósticos recientes indican que ésta apenas se incrementará cerca de 0,5%; (v) es ostensible la reducción de la utilización de la capacidad instalada de la industria; la caída de su índice de confianza; la desaceleración de la demanda de energía, de bienes de consumo durable y de vivienda; la tendencia descendente de la demanda de crédito de los hogares; y la descolgada de la cartera, en especial de la de consumo; (vi) la formación interna bruta de capital fijo continúa en niveles históricos record, al haber llegado al 27% sobre el PIB; (vii) la inflación básica sin alimentos, que es a la cual debería reaccionar la política monetaria a través de las tasas de interés, aún se ubica dentro del rango meta; (viii) el diferencial entre las tasas de referencia de Colombia y EU ha aumentado en 200 p.b desde septiembre del año anterior, el cual, de seguir ampliándose, provocaría una mayor revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro es una de las más altas del mundo, y causaría graves perjuicios para los sectores transables y la generación de empleo. Teniendo en cuenta lo anterior, la Junta de manera mayoritaria decidió aumentar su tasa de intervención a 9,75% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría aumentar las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 25 p.b. Bogotá D.C., marzo 7 de de 2008
2008-03-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 28 de marzo de 2008 El 28 de Marzo de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual en febrero aumentó por quinto mes consecutivo al cerrar en 6,35%. Este nivel supera en 35 p.b. el registro del mes anterior y en 185 p.b. el rango superior de la meta para 2008. El aumento de la inflación en febrero se explica fundamentalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos. En el mes, la inflación sin alimentos se mantuvo estable en 4,47% y algunos de los indicadores de inflación básica se redujeron ligeramente. Por su parte, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable alrededor de 5,2%. Respecto a los alimentos, su inflación pasó de 9,4% en enero a 10,5% en febrero. El aumento se debió al grupo de perecederos y, en particular, al comportamiento de los precios de la papa. La inflación de procesados, por su parte, se mantuvo en un nivel similar al de enero. A pesar de ello, la inflación anual de este subgrupo continúa exhibiendo un alto nivel (9,5%). 2 A febrero el IPP continuó acelerándose y registró una inflación anual de 3,9%, mientras que los indicadores de salarios muestran aceleraciones importantes en todos los sectores en los que se dispone de información. b. Crecimiento interno Los resultados del crecimiento del PIB para el 2007 (7,52%) y del último trimestre del año (8,14%) fueron superiores a los esperados y confirman que la economía colombiana sigue creciendo a un ritmo fuerte. Las exportaciones en dólares registraron una importante aceleración en noviembre y, especialmente, en diciembre. El buen desempeño se presentó tanto para las tradicionales como para las no tradicionales y se explica por una mejoría en los precios de exportación y un aumento en los volúmenes exportados. Las exportaciones a Venezuela mostraron un crecimiento de más de 90% para el acumulado a 12 meses en diciembre. Las exportaciones tradicionales a Estados Unidos repuntaron en los últimos meses de 2007 y las no tradicionales dejaron de caer. El crecimiento de la industria en enero según el DANE fue de 5,6%, mientras que las cifras de la ANDI señalan un crecimiento para la industria de 7,5%. Las ventas al por menor, por su parte, presentaron una caída explicada por las ventas de alimentos. Otros indicadores de gasto privado como el sentimiento de los consumidores medido por Fedesarrollo indican que este se mantuvo en un nivel alto. El ritmo de crecimiento de las importaciones se aceleró en enero frente a diciembre, particularmente en bienes de consumo durable y bienes de capital. En materia de empleo, las cifras del DANE y las encuestas sectoriales en enero muestran que ha seguido creciendo a un ritmo alto. c. Contexto internacional La actividad económica en los EEUU continuó deteriorándose. El comportamiento de diversos indicadores en febrero y marzo sugiere que el crecimiento ya habría entrado en terreno negativo en el primer trimestre del año. El sentimiento de los consumidores en marzo cayó a niveles similares 3 o incluso inferiores a los observados en la pasada recesión de 2001-2002, reflejándose en un pobre desempeño de las ventas al detal y en una caída de la producción industrial. Por otro lado, la crisis en el sector de finca raíz continúa: el precio de la vivienda sigue descendiendo, los inventarios aún no se reducen y los incumplimientos hipotecarios y los embargos de vivienda aumentan, según la última información disponible a diciembre. El sistema financiero ha sido afectado por las noticias anteriores y las dudas sobre su solidez han seguido creciendo, lo que se confirma con la difícil situación de varios bancos internacionales. Todo lo anterior hace presagiar una recesión en EEUU más fuerte y duradera de lo que inicialmente se esperaba. Los pronósticos de crecimiento para 2008 de los diferentes analistas se han reducido desde niveles de 1,5% hacia niveles cercanos a 0,5%. Se anticipa para 2009 tasas de crecimiento inferiores al 1%. Estos resultados, de confirmarse, estarían sugiriendo un desempeño económico en ese país por debajo del observado en las últimas dos décadas, lo que podría terminar afectando el crecimiento mundial. Por esta razón, las perspectivas económicas para otras economías desarrolladas también están siendo revisadas a la baja. Los precios de las materias primas han presentado gran volatilidad como resultado del aumento en la incertidumbre en EEUU. No es claro hasta qué punto los altos niveles que exhiben hoy en día estos precios obedecen a excesos de la demanda mundial o a movimientos especulativos asociados con el debilitamiento del dólar. Esto último aumenta el riesgo de que se presenten cambios con reducciones más pronunciadas que las observadas en los últimos días. Las monedas de los países emergentes, en especial de América Latina, continuaron apreciándose. Por otro lado, en las últimas semanas, las primas de riesgo de estas economías han tenido una reacción relativamente moderada al deterioro del contexto internacional. 4 d. Variables Financieras Los agregados monetarios se desaceleraron nuevamente en febrero. El M3 creció a una tasa anual de 16,9%, el efectivo lo hizo al 11,3% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) al 17,8%. En el mes continuó la aceleración de las captaciones a través de CDT. El crecimiento de la cartera del sistema financiero también continuó desacelerándose. El crédito total creció a una tasa anual de 23,1% frente 24,6% en diciembre. Cuando se observa el crecimiento marginal utilizando la serie de promedios móviles de orden 13 se aprecia una desaceleración más pronunciada en los últimos meses sobre todo en el crédito de consumo y en el comercial. Las tasas de interés nominales continuaron incrementándose y las diferentes tasas reales, tanto activas como pasivas, están en sus promedios históricos. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados frenó la tendencia descendente que traía en meses anteriores; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular de Venezuela, (vi) el efecto de la reciente revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables y (vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, las cuales continuaron aumentando, ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta, y que podrían estar reflejándose en las negociaciones salariales. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la 5 dinámica del crédito. En todo caso, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque desacelerándose. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (iv) el déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (v) el que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vi) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana, y (vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen enfrentando los países. La mayoría de la Junta consideró conveniente mantener inalterada la tasa de interés de intervención, a pesar de la persistencia de las presiones inflacionarias reseñadas y en especial del aumento en las expectativas de inflación de los agentes en la economía. Lo anterior, con el fin de acopiar mayor información para evaluar los posibles efectos sobre el crecimiento de una recesión más profunda y prolongada en los Estados Unidos, así como del impacto de las medidas de política monetaria adoptadas en el pasado. Unos miembros de la Junta señalaron la importancia de tener la inflación y las expectativas de inflación ancladas a las metas, para lo cual consideran necesario mantener una postura de la política monetaria restrictiva, que facilite en el futuro una política contracíclica en el manejo monetario. Lo anterior, a pesar de las perspectivas de menor crecimiento de la economía, en especial por el efecto de la recesión en los Estados Unidos. Un miembro de la Junta estimó que debería disminuirse la tasa de interés de intervención, por las siguientes razones: (i) Las medidas tomadas por la Junta han tenido y seguirán teniendo los efectos buscados por la política monetaria. Lo anterior se refleja ya en la reducción de la utilización de la capacidad instalada de la industria, la caída de su índice de confianza, la desaceleración de la demanda de energía y de bienes de consumo durable y de vivienda, el aumento de las tasas de interés y la tendencia descendente de la demanda de crédito de los hogares y la descolgada de la cartera, en 6 especial de la de consumo; (ii) La información disponible sugiere que se presentará una corrección importante en los próximos meses de los precios internos de los alimentos perecederos; (iii) La dinámica de la economía colombiana en los años 2008 y 2009 se va a afectar por el deterioro del crecimiento de la economía norteamericana y mundial a lo cual se suman los posibles problemas futuros que afecten a Venezuela; (iv) Una disminución de la tasa de intervención conduciría a que no se siga ampliando el diferencial de las tasas internas y externas y a una menor presión sobre la revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro es una de las más altas del mundo, y causaría graves perjuicios para los sectores transables y la generación de empleo. Teniendo en cuenta lo anterior la Junta de manera mayoritaria decidió mantener inalterada su tasa de intervención en 9,75% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalterada las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9,75%. Bogotá D.C., abril 11 de 2008
2008-04-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de abril de 2008 El 25 de Abril de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual en marzo se situó en 5,93%, 42 p.b. por debajo de la observada un mes atrás. El descenso se dio luego de cinco meses de aumentos consecutivos. La desaceleración de la inflación en marzo se explica por el comportamiento de los precios de los alimentos (8,6% en marzo frente a 10,5% en febrero) y, en especial, de los perecederos. A pesar de ello, la inflación anual de este subgrupo continúa exhibiendo un alto nivel (9,6%). La inflación sin alimentos se incrementó en el mes de marzo alcanzando 4,67% frente a 4,47% del mes anterior, lo cual obedeció fundamentalmente al comportamiento de los regulados, cuyos precios mostraron incrementos anuales de 6,57% a febrero y 7,7% a marzo. Algunos indicadores de inflación básica aumentaron después de permanecer cuatro meses estables. La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados, la cual suele ser un buen indicador de las presiones inflacionarias del lado de la demanda, disminuyó al pasar de 5,3% en febrero a 5,1% en marzo. Se destaca el menor ajuste de los servicios bancarios y la estabilidad de la 2 inflación anual de arriendos. Esta última se ha mantenido alrededor de 4,3% en los últimos cuatro meses. Los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados mostraron incrementos superiores a los de un mes atrás a pesar de la notoria caída que se observó en la tasa de cambio del peso con respecto al dólar. A marzo, el ritmo de crecimiento del IPP se redujo levemente y registró una inflación anual de 3,4%. b. Crecimiento interno Los resultados del crecimiento del PIB para el 2007 (7,52%) y del último trimestre del año (8,14%) fueron superiores a los esperados y confirman que la economía colombiana sigue creciendo a un ritmo fuerte. El crecimiento para el 2007 es uno de los más altos de los últimos cincuenta años. La inversión y el consumo de los hogares fueron los componentes de la demanda que más contribuyeron al crecimiento durante el 2007. Desde una perspectiva sectorial, los mayores crecimientos se observaron en la construcción, el transporte, la industria manufacturera y el comercio. La información del cuarto trimestre del 2007 confirmó el fuerte dinamismo de las exportaciones con crecimiento real de 9,2% frente a 7,7% del trimestre anterior. Para todo el 2007 el crecimiento fue de 7,5%. El promedio del primer trimestre del indicador de confianza al consumidor de FEDESARROLLO se mantuvo en un nivel alto y las exportaciones de bienes en los primeros meses del año crecieron a tasas superiores a las observadas a finales del año pasado. Por su parte, el fuerte crecimiento de las importaciones de bienes de capital sugiere que la inversión privada continúa firme. El tipo de cambio presentó una apreciación promedio anual de 14% durante el primer trimestre del año como efecto, principalmente, de las inversiones extranjeras directas orientadas a los sectores petrolero y minero. En materia de empleo, las cifras del DANE y las encuestas sectoriales muestran que ha seguido creciendo a un ritmo alto. 3 c. Contexto internacional La actividad económica en los EEUU continuó deteriorándose. Los indicadores relativos a los sectores de servicios e industria, a la percepción de los consumidores sobre su situación económica, a las ventas minoristas (reales) al mes de marzo y a la creación de empleos, han sido negativos. Por esa razón los analistas internacionales prevén una contracción del producto de EEUU en la primera mitad del año. Para el resto de 2008 y para el 2009 se esperan bajas tasas de crecimiento. En los últimos meses también ha continuado el deterioro del mercado de la vivienda. Los permisos de construcción y la construcción de vivienda nueva siguieron cayendo y los inventarios se mantienen muy altos (a febrero). La presión bajista sobre los precios de la vivienda muy probablemente continuará hacia el futuro. Esta situación está dificultando los pagos de hipotecas y ha aumentado los embargos. Adicionalmente, se han observado incrementos en la morosidad, que son más pronunciados en los créditos otorgados recientemente y que no solo se circunscriben a la cartera subprime. El sistema financiero ha sido afectado por las noticias anteriores y se mantienen las dudas sobre su solidez, lo que se confirma con las importantes pérdidas incurridas por varios bancos internacionales. d. Variables Financieras Los agregados monetarios mantuvieron la desaceleración que se observa desde noviembre del año pasado. El M3 creció a una tasa anual de 15,2%, el efectivo lo hizo al 9,8% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) al 16,05%. En el mes continuó el proceso de recomposición de las captaciones a favor de CDT. El crecimiento de la cartera del sistema financiero también continuó desacelerándose. El crédito en pesos creció en marzo 21,9% frente a 24,6% en diciembre anterior. La cartera de consumo es el segmento que muestra una desaceleración más fuerte en los últimos meses con un crecimiento de 26,1% frente a 32,6% en diciembre. En el mes de marzo las tasas nominales activas y pasivas aumentaron, con excepción de las de crédito de consumo y las de crédito hipotecario, que se redujeron ligeramente. La tasa DTF se situó en 9,6% 4 frente a 9,3% en febrero y 9,0% en diciembre. Dicha tasa se encuentra al mismo nivel que la TIB, después de dos años de registros inferiores a ella. Por su parte, la tasa activa promedio se encuentra en 16,9% frente a 16,6% en febrero y diciembre. El alza en las tasas reales ha sido menor por el aumento de la inflación en lo corrido del año. La tasa real activa promedio (11,7%) se encuentra entre el promedio calculado desde 1986 (12,5%) y el computado a partir de 2001 (9,8%). 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de tarifas; (iv) los costos de producción de las empresas muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los componentes laborales; (v) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción; (vi) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular de Venezuela; (vii) el efecto de la reciente revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables y (viii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta. La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención que se vienen haciendo desde abril de 2006 y la modificación en los encajes realizada a mediados de 2007 han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. No obstante, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de alimentos y combustibles; (iv) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza 5 de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (v) el déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (vi) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana y; (viii) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio. Algunos miembros de la Junta subrayaron la existencia de presiones inflacionarias a nivel mundial y la postura más restrictiva que han adoptado recientemente muchos bancos centrales. Señalaron que, ante las proyecciones de inflación para los próximos meses, es importante tener la inflación y sus expectativas ancladas a las metas, para lo cual consideraron necesario mantener una postura restrictiva de la política monetaria que facilite en el futuro un manejo monetario contra cíclico ante una eventual desaceleración de la economía, que contribuya a que esta alcance el máximo crecimiento sostenible. Destacaron que la información disponible indica que continúan los excesos de demanda en la economía y existen riesgos inflacionarios que pudieran llevar en el futuro a que sea necesario aumentar las tasas de interés de intervención. Consideraron que, aunque existe gran incertidumbre sobre el desempeño futuro de la economía mundial y su efecto sobre la economía colombiana, hasta el momento el contexto externo sigue siendo favorable al crecimiento colombiano a juzgar por el aumento reciente en los términos de intercambio, las exportaciones y las entradas de inversión extranjera directa. Finalmente expresaron que si bien existe un diferencial de tasas de interés entre Colombia y los Estados Unidos, la apreciación del peso se explica fundamentalmente por las fuertes presiones globales sobre la devaluación del dólar y el comportamiento de los términos de intercambio y la inversión extranjera directa. Otros miembros de la Junta estimaron que, excepto en el caso de presentarse graves perturbaciones no previstas, no sería necesario elevar las tasas de interés de intervención debido a que las medidas de política monetaria tomadas hasta ahora han tenido y seguirán teniendo los efectos buscados en materia de freno de la demanda interna y la consiguiente desaceleración de la economía. A lo anterior, se suma la importante corrección a la baja de la inflación de los alimentos perecederos y de los no transables sin alimentos ni regulados, y los posibles efectos adversos de la recesión norteamericana y la crisis mundial sobre el crecimiento de la economía colombiana, aparte de la gran incertidumbre en torno de la suerte y la sostenibilidad de la evolución económica de Venezuela. Por tales razones insistieron en la necesidad de emprender en breve un proceso gradual de normalización de la política monetaria. Dicho proceso a su turno 6 contribuiría a evitar que se siga ampliando el diferencial entre las tasas de interés internas y externas, y la consiguiente presión adicional sobre la revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro ha sido una de las más altas en todo el mundo. Teniendo en cuenta lo anterior la Junta decidió mantener inalterada su tasa de intervención en 9,75% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó mantener inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9,75%. Bogotá D.C., mayo 09 de 2008
2008-05-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 23 de mayo de 2008 El 23 de Mayo de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual en abril se situó en 5,73%, 20 p.b. por debajo de la observada un mes atrás. El descenso se dio por segundo mes consecutivo, luego de haber alcanzado su máximo reciente en febrero pasado (6,35%). La desaceleración de la inflación en abril se explica por el comportamiento de los precios de los alimentos (7,82% en abril frente a 8,61% en marzo) y, en especial, de los perecederos. Los alimentos procesados (8,75%) también descendieron gracias a las carnes y sus sustitutos. La inflación sin alimentos se incrementó en el mes de abril alcanzando 4,74% frente a 4,67% del mes anterior, lo cual obedeció, fundamentalmente, al comportamiento de los regulados, cuyos precios mostraron incrementos anuales de 7,7% a marzo y 8,10% a abril. Algunos indicadores de inflación básica aumentaron y se mantienen por encima de la meta de inflación. La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados, que suele ser un buen indicador de las presiones inflacionarias del lado de la demanda, disminuyó al pasar de 5,1% en marzo a 5,05% en abril. Se destaca el menor ajuste de los servicios bancarios y el incremento de la 2 inflación de arriendos (4,65%) después de varios meses de estabilidad alrededor de 4,3%. Los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados reportaron el mismo crecimiento anual de un mes atrás. El grupo de regulados aumentó de 7,7% en marzo a 8,1% en abril, destacándose las tarifas de servicios públicos (gas 9,8% y energía 9,4%). A abril, el ritmo de crecimiento del IPP se aceleró pasando de una inflación anual de 3,4% a 3,8%. b. Crecimiento interno La información disponible relacionada con el comportamiento de la demanda agregada muestra lo siguiente: - En el primer trimestre de 2008 las importaciones de consumo duradero crecieron 13,7% en dólares y 1,7% en volumen respecto al primer trimestre de 2007, mientras que las importaciones de bienes de consumo no duradero lo hicieron 18,3% en dólares, aunque registran caídas en volúmenes (25,4%). Los productos alimenticios, las bebidas y el vestuario fueron los rubros que presentaron mayores disminuciones en volumen. - La variación anual de las ventas de comercio al por menor disminuyó nuevamente. En marzo se ubicó en 0%. - La Encuesta de Consumo de Fedesarrollo a abril muestra unas perspectivas de los consumidores elevadas. - La inversión, medida a través de las importaciones de bienes de capital a marzo de 2008, continúa a un buen ritmo de crecimiento. Las importaciones de capital para la agricultura crecen 46% y para la industria 23%. Los volúmenes registraron aumentos importantes. - Las exportaciones continuaron con una buena dinámica. Las exportaciones tradicionales aumentaron 32,1% y las no tradicionales alcanzaron una tasa de crecimiento anual de 27,3%. Venezuela continúa siendo el principal receptor de exportaciones no tradicionales. Estados Unidos, por su parte, sigue siendo el principal receptor de exportaciones tradicionales que presentaron un crecimiento importante (21,2%). 3 Por su parte la información asociada a la producción muestra lo siguiente: - Las importaciones de bienes intermedios para la industria crecieron 13,5% en el acumulado a marzo de 2008. - En marzo, el Indice de Producción Industrial (IPI) sin trilla de café cayó 9,4%. Ajustando la serie por días hábiles, el indicador crecería 2,4%. Una estimación del efecto de la huelga de Cerromatoso es de 2 pp. De esta forma, excluyendo estos efectos, el IPI sin trilla habría crecido 4,4%. - Descomponiendo el IPI por subsectores (ajustados por días hábiles), el 58% de estos está creciendo por encima del promedio histórico (1980- 2008). De estos subsectores los subgrupos “industrias básicas de hierro y acero; fundición de metales” y “equipos y aparatos de radio, televisión y comunicaciones” son los que presentan unas caídas atípicas desde 2001. - En la Encuesta de Opinión Empresarial de Fedesarrollo, las preguntas asociadas a actividad productiva y a pedidos presentaron las reducciones más importantes en los resultados desde que se lleva a acabo la encuesta (1980). - Las importaciones de materias primas para la agricultura crecieron 62% en dólares a marzo de 2008. - El comercio presentó una desaceleración según la encuesta de Fedesarrollo. Las preguntas asociadas a variación en ventas con respecto al mes anterior y al mismo mes en el año anterior, son las que presentan los cambios más importantes desde que se lleva a cabo la encuesta (Junio de 1980). - El indicador de licencias de construcción continúo desacelerándose y a marzo de 2008, su tasa de crecimiento acumulado 12 meses fue de 7,6%. La producción de cemento también mostró menores tasas de crecimiento. - El Indice Mensual de Actividad de Colombia (IMACO) estimado hasta agosto de 2008, muestra una desaceleración, lo que indicaría disminución en los niveles de crecimiento del PIB durante los dos primeros trimestres de este año. De variables asociadas al ingreso se encuentra lo siguiente: 4 - Aunque se presentó una caída en las tasas de desempleo, el empleo asalariado continúa desacelerándose y a marzo muestra una importante disminución (2,5%). - En marzo, la creación de empleo en la industria y el comercio se desaceleró, pero sigue mostrando tasas de crecimiento positivas. - El crecimiento de los salarios reales durante el 2007 fue inferior al de 2006, cuando alcanzó un nivel alto. En particular, los salarios reales de la industria (deflactados con el IPC total) muestran crecimientos negativos en 2007. En 2008 se mantienen estas tendencias. - La carga financiera de los hogares se ha incrementado debido, principalmente, a los costos asociados a los créditos de consumo. La apreciación enero-abril de este año con respecto al mismo período del año pasado se ubicó en 15%. Continúan entradas importantes de inversión extranjera directa, las cuales a abril se ubican en US$3.070 millones, de éstas US$1.901 millones corresponden a petróleo y minería y US$1.169 millones al resto de sectores. En materia de empleo, las encuestas sectoriales a marzo si bien muestran tasas de crecimiento positivas también reflejan una moderación en el crecimiento. c. Contexto internacional La información disponible sobre los EEUU muestra una economía débil pero mejor que la esperada por los analistas internacionales. El dato preliminar sobre el crecimiento para el primer trimestre del año (0,6%) estuvo por encima de lo proyectado. Sin embargo, cifras como la de indicadores líderes de la industria y el sector servicios continuaron mostrando una menor dinámica, al igual que las ventas minoristas y la confianza de los consumidores. Aunque este menor ritmo de crecimiento estaría permitiendo una estabilidad en la inflación básica, los altos precios del petróleo han generando un fuerte aumento en las expectativas de inflación futura. Bajo este escenario, el mercado espera que la FED mantenga sus tasas de interés inalteradas, e incluso se proyectan posibles aumentos para finales de año. Los mercados financieros mostraron mayor calma en el último mes. Se presentó una menor presión de liquidez en los mercados interbancarios y una disminución de la aversión al riesgo internacional. Esto se reflejó en 5 una ligera recomposición del portafolio de inversionistas internacionales en búsqueda de activos con mayor rentabilidad y riesgo de mercado. A pesar de la caída en algunos precios de bienes básicos, estos se mantienen en niveles elevados. En el caso de nuestros principales productos de exportación, algunos de ellos continuaron aumentando al mes de abril, como es el caso del petróleo y carbón. d. Variables Financieras Los agregados monetarios, con excepción de la base monetaria, mantuvieron la desaceleración que se observa desde noviembre del año pasado. El M3 creció a una tasa anual de 13,9%, el efectivo lo hizo al 7,51% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) al 14,8%. En el mes continuó el proceso de recomposición de las captaciones a favor de CDT. El crecimiento de la cartera del sistema financiero en moneda legal creció en marzo 21,65% frente a 24,6% en diciembre anterior. Este comportamiento se debió a la cartera de consumo que muestra una desaceleración más fuerte en los últimos meses con un crecimiento de 23,7% frente a 32,6% en diciembre, mientras que la cartera comercial se incrementó (21,5%) y la hipotecaria se mantuvo. En el mes de abril las tasas de interés nominales activas y pasivas aumentaron con excepción de las del crédito consumo y preferencial. La tasa de interés activa real se aproxima a su promedio histórico (12,3% observado vs 12,5% promedio) mientras que la DTF real ya lo alcanzó (4,8%). 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de tarifas; (iv) los costos de producción de las empresas que muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los componentes laborales; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento 6 futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular de Venezuela; (vi) el efecto de la reciente revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables; y (vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta. La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención que se vienen haciendo desde abril de 2006 y la modificación en los encajes realizada a mediados de 2007 han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito y la demanda interna. Igualmente destacó que la información disponible muestra una moderación más acentuada en el crecimiento de la economía que la inicialmente esperada. Diversos indicadores de demanda y de producción presentan comportamientos en este sentido, en especial los datos de comercio y de algunos sectores de la industria. Sin embargo, las importaciones de bienes de capital sugieren que la inversión sigue con un buen dinamismo y la Encuesta de Opinión al Consumidor mantiene el indicador de confianza en niveles altos, a lo que se suma el incremento de las exportaciones. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de alimentos y combustibles; (iv) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (v) el déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (vi) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; (viii) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación frente a la nueva información disponible y (ix) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio. Algunos miembros de la Junta subrayaron que persisten presiones inflacionarias a nivel mundial y que dadas las proyecciones de inflación 7 para los próximos meses, es importante tener la inflación y sus expectativas ancladas a las metas. Para lograr ese objetivo, estimaron necesario una postura de la política monetaria que facilite en el futuro un manejo monetario contra cíclico ante una eventual desaceleración de la economía. Señalaron que conducir la inflación hacia la meta de largo plazo es fundamental para evitar en el futuro un período de dificultades económicas y que la moderación en el crecimiento de la demanda interna y el crédito reduce las presiones inflacionarias y permite el crecimiento sostenible de la economía. Destacaron que la información disponible muestra que la industria y el comercio, dos sectores altamente sensibles de la demanda interna, crecieron en el mes de marzo a una tasa inferior a los pronósticos del Banco y que las últimas encuestas sugieren también un menor crecimiento de la demanda. A este respecto consideraron necesario obtener mayor información para establecer los riesgos de inflación y de un menor crecimiento de la economía para este año y, en especial, en el 2009, antes de modificar la postura de la política monetaria. No obstante, resaltaron que, aunque existe gran incertidumbre sobre el desempeño futuro de la economía mundial, hasta el momento el contexto externo sigue siendo favorable al crecimiento colombiano a juzgar por el aumento reciente en los términos de intercambio, las exportaciones y las entradas de inversión extranjera directa. Finalmente expresaron que, si bien existe un diferencial de tasas de interés entre Colombia y los Estados Unidos, la apreciación del peso se explica fundamentalmente por las fuertes presiones globales sobre la devaluación del dólar y el comportamiento de los términos de intercambio y la inversión extranjera directa. Otros miembros de la Junta estimaron que la evolución reciente de los indicadores económicos sugiere que continúa el proceso de desaceleración de la economía que se inició desde finales del año anterior, tanto desde la oferta como de la demanda y que esta desaceleración es más rápida de lo previsto inicialmente, aún descontando los efectos de la Semana Santa y de la huelga en Cerromatoso. A lo anterior se suma el efecto negativo de la revaluación en algunos sectores y en el ingreso disponible de los hogares vía menores ingresos de remesas. Destacaron que Colombia está enfrentando, al igual que otros países, un choque de oferta sobre la inflación liderado por los precios de los alimentos y cuestionaron, por esta razón, la pertinencia de mantener una política monetaria restrictiva. Indicaron que las medidas tomadas por la Junta en el pasado han tenido y seguirán teniendo los efectos buscados de moderar el crédito y que ya se presenta una importante corrección a la baja de la inflación de los alimentos perecederos y de los no transables sin alimentos ni regulados. Deben considerarse, adicionalmente, los posibles efectos adversos de la recesión norteamericana y la crisis mundial sobre el crecimiento de la economía colombiana, aparte de la gran incertidumbre en torno de la suerte 8 y la sostenibilidad de la evolución económica de Venezuela. Por tales razones propusieron disminuir la tasa de interés de intervención en 25 p.b lo cual contribuiría a reducir el diferencial entre las tasas de interés internas y externas, y la consiguiente presión adicional sobre la revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro ha sido una de las más altas en todo el mundo. 3. Decisión de política La Junta Directiva, por mayoría, acordó mantener inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. Bogotá D.C., junio 6 de 2008
2008-06-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20 de junio de 2008 El 20 de junio de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 6,39%, 66 pb por encima de la observada en abril, luego de haber caído durante los dos meses anteriores. La inflación acumulada en los cinco primeros meses del año ascendió a 5,1%, nivel que supera en 70 pb el registro de igual período del año pasado. Todos los indicadores de inflación básica aumentaron en mayo y algunos se mantienen por encima de la meta de inflación. La aceleración de la inflación durante mayo se explica, principalmente, por el comportamiento del precio de los alimentos (incremento de 9,7% en mayo frente a 7,8% de abril). En especial, de los perecederos (papa y otras hortalizas y tubérculos) y de los importados. La inflación sin alimentos fue 4,8%, levemente superior al 4,7% de abril. El aumento obedeció al grupo de no transables sin alimentos ni regulados cuya inflación se situó en 5,25% frente a 5,05% en abril. La inflación anual de arriendos (4,7%) se mantuvo en un nivel cercano al observado el mes pasado y se presentó una nueva alza de los servicios bancarios. El grupo de regulados pasó de 8,1% en abril a 8,3% en mayo. Desde septiembre del año pasado la inflación de esta canasta viene aumentando como resultado de los incrementos de los precios de los combustibles y de los servicios públicos. El único grupo cuya inflación disminuyó fue el de transables sin alimentos ni regulados al pasar de 2,4% en abril a 2,2% en mayo. Dentro de este grupo se destaca el comportamiento a la baja de los precios de los vehículos (-4,6% de inflación anual). En general, el precio de los bienes de consumo durable se viene reduciendo, probablemente por el efecto de la apreciación acumulada. Las expectativas de inflación a un año, medidas por las encuestas a analistas y los precios de los papeles de deuda interna, aumentaron y se situaron por encima de 5,5%. A mayo, el índice de crecimiento del IPP pasó de una inflación anual de 3,8% en abril a 5,4%. b. Crecimiento Interno La información disponible relacionada con el comportamiento de la producción, la demanda agregada y el ingreso, muestra lo siguiente: - El indicador de confianza de los hogares de la encuesta de Fedesarrollo, entre enero y mayo mostró una caída frente a 2007, aunque mantiene niveles relativamente altos. - En abril, la producción industrial sin trilla de café creció a una tasa anual de 9,8%. Este crecimiento contrasta con la caída de 9,4% registrada en marzo y que, en su momento, se explicó principalmente como resultado de menores días hábiles en ese mes y de la huelga en Cerromatoso. Para el bimestre marzo-abril el crecimiento anual fue de -0,2%. Año corrido a abril el crecimiento anual fue de 3,5%. - Las cifras del DANE indican que las ventas al por menor crecieron en abril 1,2%, tasa superior a la de un mes atrás pero baja con respecto a lo observado a finales de 2007 y comienzos de 2008. Por sectores, el peor desempeño se observó en las ventas de alimentos (-3,5%). Otros sectores como calzado y textiles también mostraron cifras negativas. - Las exportaciones en dólares mantuvieron su dinamismo en el primer trimestre del año. Las exportaciones totales acumuladas a 12 meses crecieron a una tasa cercana al 30%, similar a la de comienzo de año y superior a la observada en 2007. - El aumento en los precios de varios productos primarios de exportación unido a un mayor volumen exportado, explica la aceleración de las exportaciones tradicionales en lo corrido del año (34% en marzo para el acumulado a 12 meses en dólares). - Las exportaciones no tradicionales presentaron a marzo un crecimiento cercano al 25%. En el último mes se observó una desaceleración de las exportaciones dirigidas hacia Venezuela. Este fenómeno puede haber ocurrido debido a las restricciones fronterizas que se presentaron en marzo y a la presencia de Semana Santa en ese mes. No obstante, el menor crecimiento fue, en parte, compensado por un aumento de las exportaciones no tradicionales hacia EEUU. - Las importaciones mostraron en abril una recuperación frente al desempeño de marzo, lo que sugiere que la presencia de Semana Santa en este segundo mes generó algún efecto estadístico. Para el acumulado a 12 meses las importaciones totales se mantuvieron en tasas del orden del 24%, similar a las que se observan desde 2006. En el caso de las importaciones de bienes de consumo se observa una moderación en su crecimiento, particularmente de los bienes durables. - El indicador de inversión en obras civiles publicado por el DANE muestra una caída de 30% anual con respecto al primer trimestre de 2007. Esta caída, muy superior a la esperada, puede obedecer al relevo de gobiernos locales. - Las menores cifras de crecimiento para industria, comercio y obras civiles en el primer trimestre habrían sido parcialmente compensadas por un mejor desempeño de los sectores agropecuario, minero y financiero. - Las cifras de la Encuesta de Hogares a abril sigue mostrando caídas en la tasa de desempleo en todos los dominios, aunque de menor magnitud en comparación con las de los últimos meses. Las tasas de desempleo trimestrales se ubicaron en 11,3% y 12,1% para el total nacional y las 13 principales áreas urbanas respectivamente, indicando caídas de 0.5 pp. y 0.3 pp. con respecto al mismo trimestre del año anterior. - El descenso en la tasa de desempleo se explica por el mayor dinamismo de la creación de empleo con respecto a la oferta laboral, pues el número de ocupados creció 4,5% anual a nivel nacional. c. Contexto externo Los indicadores de la actividad económica de los EEUU en abril y mayo mostraron un desempeño mejor que lo esperado por los analistas internacionales. Esto es especialmente cierto en industria y servicios. Las exportaciones, impulsadas por el debilitamiento del dólar, podrían explicar en parte este resultado. A pesar de que las políticas de estímulo monetario y fiscal adelantadas en EEUU han empezado a amortiguar la caída de la economía, el consumo de los hogares sigue afectado por las fuertes restricciones de crédito, el debilitamiento del mercado laboral, el efecto en el ingreso disponible del aumento de los precios energéticos y la caída del precio de la vivienda. La inflación en EEUU se ha mantenido alta y es probable que continúe aumentando con las recientes alzas en el precio internacional del petróleo. La mayor inflación ha aumentado las expectativas de los agentes que se incrementaron de manera importante en los dos últimos meses. Los analistas internacionales esperan un crecimiento en EEUU en lo que resta del año de 0,8% y un desempeño por debajo del promedio histórico para 2009 de 1,2%. Los aumentos en la inflación y en las expectativas de inflación se presentaron no solo en EEUU sino también en un buen número de economías tanto emergentes como algunas desarrolladas, siendo el caso más importante el de la zona del euro. Esta situación ha conducido a aumentos en tasas de interés o anuncios de posibles aumentos hacia el futuro por parte de varios bancos centrales, incluso a pesar de que las perspectivas de crecimiento han disminuido. d. Variables Financieras El crecimiento de los agregados monetarios más amplios continuó desacelerándose en mayo. El M3 creció a una tasa anual de 13,5%, por debajo de la del mes anterior (13,9% ). El comportamiento de los pasivos sujetos a encaje (PSE) fue similar. En los últimos dos meses se siguió observando una recomposición de los PSE a favor de los CDT. La cartera del sistema financiero viene creciendo en lo corrido del año a una tasa anual cercana al 20%. La cartera en pesos sigue siendo la que exhibe mayor dinamismo aunque presenta una tendencia hacia la desaceleración desde hace cerca de un año. La cartera de consumo sigue moderándose más rápidamente que la comercial y la hipotecaria. Para mayo su crecimiento anual fue de 22,4%. La cartera comercial y la hipotecaria han mantenido un crecimiento más estable en lo corrido del año de alrededor de 20,5% y 16,4% respectivamente. En el mes de mayo las tasas de interés nominales diminuyeron. El descenso fue más fuerte en las tasas de colocación, principalmente en las de consumo (92 pb), preferencial (72 pb) y ordinario (49 pb). Las tasas de captación incluida la DTF cayeron alrededor de 20 pb El descenso de las tasas fue un poco mayor en términos reales dado el aumento de la inflación sin alimentos en el último mes. La tasa activa promedio real se encuentra un poco por debajo de su media histórica (desde 1986). La tasa real de consumo se encuentra por debajo de esta media pero también por debajo del promedio observado desde 2001. La apreciación enero-mayo de este año en promedio con respecto al mismo período del año pasado se ubicó en 14%. Continuaron presentándose entradas importantes de inversión extranjera directa, en especial en los sectores de petróleo y minería. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; (iv) los costos de producción de las empresas que muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los componentes laborales; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; (vi) el efecto de la revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables; (vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta y (viii) el fuerte impacto en el crecimiento del PIB del primer trimestre de la caída de la inversión en obras civiles y la incertidumbre por sus posibles efectos en el crecimiento futuro. La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención realizadas a partir de abril de 2006 y la modificación a los encajes a mediados de 2007 han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito y la demanda interna. El comportamiento de los indicadores de inflación básica y de las expectativas de inflación confirman que la expansión de la demanda hacía necesaria su moderación con el fin de reducir las presiones inflacionarias y evitar un crecimiento insostenible de la economía. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y los combustibles; (iv) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que sigue mostrando una tendencia al alza; (v) el déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (vi) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio; (vii) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio: (viii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; (ix) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual hay un quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; (x) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al alza y de desaceleración de la economía y (xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y de los combustibles. La Junta destacó que persisten presiones inflacionarias a nivel mundial y que dadas las proyecciones de inflación para los próximos meses, es importante tener la inflación y sus expectativas ancladas a las metas. A pesar de que las condiciones externas continúan siendo favorables al crecimiento económico, los indicadores disponibles en el último mes sugieren una importante moderación en el crecimiento de la demanda interna y el producto. Por lo anterior, consideró que con el nivel actual de las tasas de interés de intervención se está dando la moderación requerida en el crecimiento de la demanda y es prudente, por lo tanto, mantener la actual postura de la política monetaria. La Junta Directiva de manera unánime decidió mantener inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9, 75% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de las presiones inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. Adicionalmente, acordó intensificar la acumulación de reservas internacionales en lo que resta de 2008 con el fin de hacer frente a un eventual deterioro del entorno internacional, aprovechando niveles de la tasa de cambio inferiores a los sostenibles. Para compensar los efectos monetarios de esta medida se decidió modificar a partir del 1 de septiembre el esquema de encaje, eliminando el encaje marginal y estableciendo un encaje promedio ordinario del 10% (11,5% para cuentas corrientes y de ahorro y 6% para CDT) y, si fuera necesario, abrir sus ventanillas de contracción. 3. Decisión de Política La Junta Directiva acordó de manera unánime mantener inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9,75% Bogotá D.C., julio 04 de 2008
2008-07-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de julio de 2008 El 25 de julio de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en junio se situó en 7,18%, 79 pb por encima de la observada en mayo. La inflación acumulada en los seis primeros meses del año ascendió a 6%. Algunos de los indicadores de inflación básica aumentaron en junio y se mantienen por encima de la meta de inflación. La aceleración de la inflación durante junio se explica por el comportamiento del precio de los alimentos (incremento de 12% en junio frente a 9,7% de mayo), en especial, de la papa y el arroz. Otros alimentos, tanto perecederos como procesados, siguen mostrando ajustes anuales de precios muy altos y crecientes. La inflación anual sin alimentos fue 4,9%, levemente superior al 4,8% de mayo. La de los subgrupos de bienes transables y no transables sin alimentos ni regulados permanecieron estables frente a mayo. La inflación del grupo de regulados pasó de 8,3% en mayo a 8,8% en junio como resultado de aumentos en las tarifas de energía y gas y en los precios de los combustibles. Las expectativas de inflación a uno, cinco y diez años, medidas por las encuestas a analistas y los precios de los papeles de deuda interna, aumentaron y se situaron por encima de 5,5%. El incremento anual en el índice de crecimiento del IPP pasó de 5,4% en mayo a 8%. b. Crecimiento interno La información disponible relacionada con el comportamiento de la producción, la demanda agregada y el ingreso, muestra lo siguiente: - El DANE dio a conocer el crecimiento en la producción para 2007 a partir de la nueva base 2000. De acuerdo con esta información, en 2007 la economía colombiana (sin cultivos ilícitos) se expandió a un ritmo de 8,2% y no de 7,6% como se había señalado inicialmente. La mayor tasa de crecimiento se presentó en el primer trimestre (9,1%), pero el cuarto trimestre también presentó una variación anual muy alta (8,4%). Con la nueva base, 2007 es el año de mayor expansión de la actividad económica de las últimas cinco décadas. - Las cifras del DANE para el crecimiento del PIB en el primer trimestre señalan un registro de 4,1%. La desaceleración del crecimiento fue el resultado de diversos factores, tanto de oferta como de demanda, algunos de ellos de naturaleza puntual. El más importante corresponde al impacto directo de la caída de las obras civiles que, como se ha señalado en otras ocasiones, pudo obedecer al cambio de administraciones públicas locales y regionales. Un segundo factor fue el menor número de días hábiles en el trimestre debido a que la Semana Santa cayó en marzo. La huelga de Cerromatoso y la reducción de las exportaciones de automóviles a Venezuela también afectaron de manera importante el crecimiento del PIB. - La economía colombiana, al igual que la mundial, enfrenta desde hace varios trimestres un encarecimiento importante de los costos de producción y de transporte, como consecuencia de las fuertes alzas en los precios del petróleo y de algunas materias primas. Estas circunstancias afectan negativamente el producto y elevan los precios. - Por el lado de la demanda, los aumentos en los precios de los combustibles y de los alimentos afectan el ingreso real disponible de los hogares, frenando el consumo presente y el consumo futuro, esto último especialmente a través de una pérdida en la confianza de los consumidores. - Las cifras del DANE muestran que la formación bruta de capital fue el componente que registró mayor desaceleración, asociada más con la caída de la inversión en obras civiles realizadas por el sector público, que con un deterioro de la inversión privada. - El consumo de los hogares también se desacelero, pasando de crecer 5,6% en el cuarto trimestre de 2007 a 3,9% en el primero de 2008. De acuerdo con la nueva serie (base 2000), el consumo habría empezado a desacelerarse a partir del segundo trimestre de 2007, lo que contrasta con la información previa, la cual no mostraba una desaceleración importante durante el año pasado - Las exportaciones totales aumentaron 15% en pesos reales a comienzos de año. Esta expansión se dio pese a la apreciación del tipo de cambio y obedece a la fuerte demanda venezolana por productos manufactureros y alimentos y al aumento de la producción de productos mineros como el carbón. - La demanda final interna creció a un ritmo de 5,4% anual durante el primer trimestre, lo que implicó una desaceleración frente a lo observado en 2007, pero aún por encima del promedio histórico. Por su parte, el crecimiento anual de la demanda agregada a marzo fue 6,7%, frente a 11,1% del cuarto trimestre de 2007 y de 10,3% de todo el año pasado. - El comportamiento de indicadores de producción industrial, de ventas de comercio al por menor y de confianza de los consumidores a mayo sugieren nuevamente un crecimiento menor para el segundo trimestre, que el observado en 2007. - Todas estas circunstancias llevaron a una reducción por parte del equipo técnico del Banco en la proyección de crecimiento para 2008 a un rango entre 3,3% y 5,3%, frente al anterior que estaba entre 4,0% y 6,0%. - Los indicadores disponibles de salarios no muestran una tendencia homogénea por sectores. Mientras que a junio los salarios promedio de la construcción pesada se aceleraban, registrando reajustes elevados, los crecimientos anuales de los salarios de la industria y del comercio se mantuvieron estables alrededor de tasas de 5,3% y 7,5% respectivamente. c. Contexto externo En los Estados Unidos, durante los últimos meses el empleo continuó cayendo, una señal de que la actividad productiva se encuentra debilitada. Simultáneamente, el sector de vivienda no muestra indicios de recuperación y, por el contrario, su situación podría estarse deteriorando aún más. Como resultado del aumento en la morosidad del crédito hipotecario y de los embargos de vivienda, los precios de la vivienda continuaron reduciéndose en abril y podrían seguir haciéndolo en los próximos trimestres. Aunque durante el segundo trimestre se observó una mejoría en las condiciones financieras en los Estados Unidos, esta tendencia no se ha mantenido en las últimas semanas. La crisis hipotecaria siguió golpeando a las instituciones financieras, siendo afectadas en esta oportunidad las dos mayores entidades respaldadas por el gobierno que cubren el sector de créditos de vivienda. (Fannie Mae y Freddie Mac). A raíz de estos problemas han surgido nuevamente presiones de liquidez en el mercado interbancario de ese país como lo registra el incremento del diferencial entre el costo del endeudamiento del tesoro y de los bancos comerciales. Igualmente, se han producido descensos significativos en los índices accionarios, que ya no solo se circunscriben a las empresas financieras sino que también se extienden a las del sector real (excluyendo las de energía). El crecimiento también ha perdido impulso fuera de los Estados Unidos, siendo el caso más evidente Europa en donde ya se observa un deterioro importante en la confianza de consumidores y empresarios. En algunos países emergentes de la región como Venezuela, Ecuador, Chile y México también se observó una desaceleración del crecimiento para el primer trimestre. A pesar de ello, la tasa de crecimiento para la región en su conjunto sigue siendo relativamente alta. Para Venezuela, en particular, el crecimiento del primer trimestre fue 4,8%, reduciéndose frente al observado en 2007 (8,5%). La demanda interna perdió impulso por una fuerte desaceleración del consumo y la inversión privada. No obstante el menor dinamismo de la economía mundial, los precios internacionales de los productos básicos, en particular del petróleo, continuaron en niveles altos, lo que siguió impulsando la inflación a nivel mundial. En los Estados Unidos en particular, la inflación total al consumidor continuó aumentando y en junio se situó en 5%, por encima de las expectativas de los analistas. Se espera que los precios de los productos básicos se mantengan en niveles altos. Aunque podrían existir comportamientos especulativos, es probable que factores fundamentales relacionados con el balance de oferta y demanda expliquen el auge de estos precios. En esas condiciones, un retroceso significativo de los precios de las materias primas y del petróleo quizá sea posible solo si se presenta una desaceleración fuerte en la demanda mundial, más allá de la prevista por el mercado. Los aumentos en la inflación y en las expectativas de inflación se presentaron no solo en los Estados Unidos sino también en un buen número de economías emergentes y desarrolladas, siendo el caso más importante el de la zona del euro. Esta situación ha conducido a aumentos en tasas de interés o anuncios de posibles aumentos hacia el futuro, por parte de un buen número de bancos centrales, a pesar de que las perspectivas de crecimiento han disminuido. d. Variables financieras El crecimiento de los agregados monetarios más amplios se ha estabilizado en el último trimestre en niveles superiores al crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año. A la segunda semana de julio, el M3 crecía a una tasa anual de 12,5% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) aumentaron 13,3%. Se sigue observando una recomposición en los PSE a favor de los CDT. La cartera del sistema financiero viene creciendo en lo corrido del año a una tasa anual cercana al 18,9% frente a 20% del mes pasado. La cartera en pesos sigue siendo la que exhibe mayor dinamismo aunque presenta una tendencia hacia la desaceleración desde hace cerca de un año. La cartera bruta en moneda nacional continuó desacelerándose, aunque a un menor ritmo. A junio esta variable creció 18,9%, mientras que un mes atrás lo hacía a 20%. El mayor descenso en la tasa anual de crecimiento lo continúa registrando la cartera de consumo (incluye microcrédito) con variaciones a doce meses de 20,6%, seguida de la comercial 19,7% y la hipotecaria 16,1%. Diferentes medidas de tendencia de cartera sugieren que su crecimiento terminaría al finalizar el año en alrededor de 18%. Las tasas promedio nominales de interés de captación (9,7% - DTF) y colocación (17,1% - metodología BR) aumentaron levemente en junio. Estos niveles son similares a los registrados en abril pasado. En términos reales, la tasa promedio de crédito ha tenido un comportamiento decreciente desde octubre de 2007, interrumpido únicamente en abril del presente año, y su actual nivel se encuentra por debajo del promedio histórico calculado desde 1986. Este último comportamiento se explica por el descenso en la tasa real de créditos ordinarios y, en menor medida, por la menor tasa de interés real de consumo. La apreciación enero-junio de este año en promedio con respecto al mismo período del año pasado fue 13,5%. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; iv) los costos de producción de las empresas que muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los componentes laborales; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; vi) el efecto de la revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables; vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta y viii) el fuerte impacto en el crecimiento del PIB del primer trimestre de la caída de la inversión en obras civiles y la incertidumbre por sus posibles efectos en el crecimiento futuro. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; iii) las malas proyecciones de inflación a corto plazo; iv) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y los combustibles; v) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que sigue mostrando una tendencia al alza; vi) las menores proyecciones de déficit de la cuenta corriente ; vii) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio; viii) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio: ix) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; x) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual hay un quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; xi) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al alza y de desaceleración de la economía y xii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y de los combustibles. La mayoría de la Junta consideró que la presente coyuntura es particularmente delicada y amerita un análisis con una explícita perspectiva de mediano y largo plazo. Si bien la economía presenta claras señales de desaceleración, y el balance de riesgos indica que el crecimiento este año será menor que en los años recientes, los riesgos de una inflación que ponga en peligro el crecimiento en el mediano plazo son considerables. Contrario a lo observado en 2007, durante el primer semestre del 2008 la economía ha recibido plenamente, el impacto del choque de precios de alimentos, combustibles y metales que viene afectando a la economía mundial, sumado al producido por factores climáticos locales. De hecho, el diagnóstico de las razones que explican la desaceleración de la economía indica que los altos niveles de inflación, dada su relación con estos choques de precios relativos, están generando presiones de costos que afectan negativamente la oferta de varios sectores productivos, entre ellos la industria manufacturera. Adicionalmente, la inflación de alimentos y regulados viene erosionando el poder de compra de los consumidores por otros bienes de la canasta familiar. De aquí se desprende que la naturaleza de la inflación explica buena parte del menor crecimiento económico reciente. De otro lado, las expectativas de inflación a corto, mediano y largo plazo han venido subiendo, lo que constituye un serio obstáculo para los propósitos de la autoridad monetaria y la mayor efectividad de las decisiones de política adoptadas y por adoptar. Esto es particularmente peligroso en momentos en que las medidas de difusión de la inflación alcanzan valores cercanos al 70%, indicando que la mayor inflación de alimentos y bienes regulados ha alcanzado ya a contaminar parte de la canasta familiar. Y cuando los recientes incrementos en las tasas de interés de intervención han sido absorbidos por la mayor inflación que se ha registrado este año, así esta refleje en parte aumentos transitorios de precios. Es indispensable entonces evitar que la política monetaria valide los choques de precios relativos de carácter temporal y permita que éstos se conviertan en una inflación, mayor y de naturaleza permanente, con enormes costos económicos y sociales. De lo anterior se deduce que en el momento no existe realmente una disyuntiva entre inflación y crecimiento. El dilema de la autoridad monetaria es entre buscar una mayor dinámica de la economía en el muy corto plazo, probablemente de carácter temporal y que va a ser erosionada por una inflación desbordada y, por el otro lado, consolidar las condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo, retomando una senda sensata de la inflación hacia las metas de largo plazo. Para esto es necesario incrementar las tasas de intervención del Banco. Algunos directores advirtieron que en esta ocasión un incremento adicional de la tasa de interés resultaría inconveniente e inoportuno habida cuenta de las siguientes razones: i) La reciente evolución de los indicadores económicos confirma que la economía se está desacelerando desde finales del año anterior de una manera mucho más rápida de lo que inicialmente habían previsto las autoridades económicas. El mismo equipo técnico del Banco se ha visto obligado a ir reduciendo los pronósticos sobre el crecimiento de la economía en 2008, primero de 5,2% anual al 4,7%, y, de acuerdo con su último ejercicio, del 4,7% al 4,3%. ii) Colombia está enfrentando, al igual que otros países, un choque de oferta sobre la inflación por el aumento de precios de los alimentos. En la región, Colombia registra un incremento de la inflación total y básica relativamente moderado. El cambio de postura de la política monetaria desde inicios de 2006 y las medidas adicionales de control de la inflación ha permitido que dicha postura en términos reales no se haya erosionado por cuenta del aumento en la tasa de inflación. iii) El gobierno anunció un recorte al presupuesto de 2008 de $1.5 billones, equivalente al 0,4% del PIB el cual tiene como uno de sus objetivos fundamentales aliviar la presión sobre la política monetaria derivada del incremento de la inflación. Esta medida ajusta las cuentas fiscales y tiene un efecto importante sobre el crecimiento de la demanda pública y el crecimiento económico en general y, por tanto, sobre el comportamiento de la inflación. iv) Cabe destacar que la política monetaria adoptada por la Junta desde abril de 2006 ha demostrado por sus resultados que ha ido en la dirección correcta, Además, no se debe olvidar que más de la mitad de los 15 incrementos de la tasa de interés de intervención del Banco tuvo lugar hace menos de año y medio, lo cual indica, debido al rezago natural existente entre estas medidas y su impacto sobre la demanda interna y el crédito, que aún existe un tramo muy considerable de efectos remanentes que aún no se han sentido, y v) Un aumento adicional de la tasa de interés ampliaría aún más el ya significativo diferencial existente entre las tasas internas y externas, y agudizaría por tanto la presión hacia la revaluación del peso y el consiguiente perjuicio sobre el empleo de los sectores transables de la economía. La Junta Directiva de manera mayoritaria decidió aumentar en 25 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de las presiones inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó por mayoría aumentar en 25 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República que pasaran de 9,75% a 10%. Bogotá D. C., agosto 08 de 2008.
2008-08-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 15 de agosto de 2008 El 15 de agosto de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Óscar Iván Zuluaga, el gerente general, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en junio se situó en 7,52%, incrementándose por tercer mes consecutivo. La inflación acumulada en los cinco primeros meses del año asciende a 6,5%, 181 puntos base (pb) por encima del registro del año pasado. Algunos de los indicadores de inflación básica aumentaron en junio y se mantienen por encima de la meta de inflación. La aceleración de la inflación durante junio se explica por el comportamiento del precio de los alimentos, siendo el arroz y los aceites los que ejercieron la mayor presión alcista. La inflación de regulados pasó de 8.8% en junio a 9.5% en julio, principalmente por combustibles y transporte. La inflación de transables y no transables sin alimentos ni regulados se redujo en el último mes. En particular, el IPC de no transables sin alimentos ni regulados fue 5,1% en julio frente a 5,3% en junio. Las expectativas de inflación a mediano y largo plazo implícitas en el comportamiento del mercado de TES se redujeron con posterioridad a la sesión de la Junta del 25 de julio, lo cual constituye un punto de quiebre en la tendencia al alza que se venía presentando desde abril. Adicionalmente, entre el 25 de julio y el 12 de agosto se observó una reducción en las tasas de los TES de mediano (59 pb) y largo plazo (90 pb). A julio, la inflación al productor medida por el IPP total se aceleró nuevamente, pasando de 8% en junio a 9,6%, el más alto desde 2003. b. Crecimiento interno 2 La información disponible no sugiere cambios en la proyección de crecimiento del PIB del equipo técnico del Banco para este año, que está entre 3,3% y 5,3%, La información de la industria en los últimos dos meses indica que el sector continuó reduciendo su dinamismo y que esto ha sucedido a un ritmo mayor que el esperado. De acuerdo con la Encuesta de Opinión Conjunta de la ANDI, la producción industrial presenta un crecimiento anual año corrido a junio de 1,2%, menor que el registrado en abril y mayo (2,8% y 1,9% respectivamente). Los indicadores de confianza de los industriales y el nivel de existencias y de pedidos a junio corroboran estas tendencias. Los indicadores de comercio no son concluyentes acerca de las tendencias del sector. La información proveniente de los balances de las encuestas de opinión de Fenalco sugiere que las ventas han continuado perdiendo impulso, aunque a un ritmo menor que en el primer trimestre. Por otro lado, diferentes indicadores de Fedesarrollo como el de situación económica actual para el sector y el de expectativas de situación económica a seis meses no presentan un deterioro adicional para los últimos dos meses. Las últimas cifras en materia de exportaciones muestran que éstas mantienen un fuerte dinamismo al registrar un crecimiento en dólares de 42,4% y de 22,9% para las exportaciones no tradicionales. Las cifras sobre demanda de energía a junio y julio mostraron mejoría luego de registros bajos en meses anteriores. En julio, por ejemplo, el crecimiento anual fue de 2,8%, superior al observado en lo corrido del año a junio (2,1%). Por su parte, los recaudos de IVA interno mostraron tasas de crecimiento nominal durante todo el primer semestre superior a los dos dígitos, habiéndose acelerado en junio a 35,7%. c. Contexto externo En los últimos meses la inflación mundial se ha acelerado como consecuencia de los altos precios de los alimentos y bienes energéticos. A su vez, se ha presentado un menor ritmo de crecimiento económico. Este fenómeno ha sido más profundo en Japón, Inglaterra y la Zona Euro, economías que ya han empezado a sentir el efecto de los altos precios de las materias primas y de la desaceleración de los Estados Unidos. En el caso de los Estados Unidos, durante el segundo trimestre se observó un crecimiento anual de 1,9%. Sin embargo, esto no modifica las perspectivas desfavorables para éste y el próximo año. Los analistas han revisado a la baja las proyecciones de crecimiento de ese país para 2008 y 2009. En la Zona Euro los índices de confianza de los consumidores y el índice de producción manufacturera han disminuido fuertemente en los últimos meses, debilitando las proyecciones de crecimiento del PIB para 2008 y 2009. Estos indicadores han sido aún más desfavorables para el caso del Japón y Reino Unido. Lo mismo ha sucedido con algunos países emergentes de la región como Venezuela, Ecuador, Chile y México en donde se sigue observando una desaceleración del crecimiento. 3 En ese contexto, el dólar se ha fortalecido frente a un gran número de monedas. Esta situación, junto con las perspectivas de una demanda mundial más débil, ha conducido a una caída de los precios de las materias primas en las últimas semanas, en especial, del petróleo. d. Variables financieras El crecimiento anual de los principales agregados monetarios en julio se redujo en el último mes y medio. Entre junio y julio, por ejemplo, el crecimiento de M3 pasó de 14,5% a 11,5%. Las captaciones del sistema financiero siguen efectuándose, en buena parte, a través de CDT. La cartera del sistema financiero en pesos mantuvo, en julio, un crecimiento de 19,4%, muy similar al observado en el mes anterior. Cuando se examina el comportamiento de los últimos meses no se observa una tendencia hacia la desaceleración de este agregado. La moderación de la cartera de consumo (crece 18,4% en julio) ha continuado siendo compensada por una aceleración de la cartera ordinaria (20,4% en julio) y, en las últimas tres semanas, por un crecimiento mayor de la cartera hipotecaria (16,5% en julio) La mayoría de tasas de interés nominal disminuyeron en el último mes. La reducción más grande se presentó en las de tarjetas de crédito (40 pb). Cabe señalar que la tasa de usura también se redujo en este período cerca de 60 pb. La tasa de cambio mostró entre julio 14 y agosto 14 una devaluación de 4,2%. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta, si bien algunos rubros de la canasta han empezado a mostrar aumentos menores de precios, como es el caso del IPC sin alimentos ni regulados; ii) la incertidumbre sobre el comportamiento de los precios internacionales de los alimentos y del petróleo, que en las últimas semanas han tenido una tendencia a la baja, y sobre sus efectos en la inflación total; iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; iv) los costos de producción de las empresas, que muestran incrementos importantes; v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; vi) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables y vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta, aunque disminuyeron en el último mes. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2008 y 2009; iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de 4 altos precios internacionales de los alimentos y los combustibles; iv) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que en el mes de julio presentó una disminución frente al mes anterior; v) las menores proyecciones de déficit de la cuenta corriente ; vi) los efectos de la apreciación acumulada de la tasa de cambio y de la devaluación observada en las últimas semanas; vii) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; viii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; ix) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual hay un quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; x) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al alza y de desaceleración de la economía y xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y los combustibles. En la reunión se destacó que la inflación continúa aumentando en muchos países y cómo varios bancos centrales han incrementado sus tasas de interés. Los precios internacionales del petróleo, alimentos y otros productos básicos han caído recientemente, pero sus niveles se mantienen históricamente altos. En Colombia, las expectativas de inflación a varios plazos, medidas a partir del mercado de títulos de deuda pública TES, disminuyeron significativamente desde la decisión de la Junta Directiva pasada de aumentar en 25 pb su tasa de intervención. Sobresale, además, la reciente disminución en las tasas de interés de largo plazo y el descenso en la inflación de no transables sin alimentos ni regulados en julio. La información disponible muestra que al igual que en otros países, en Colombia se ha moderado el crecimiento de la demanda interna y el producto, aunque se mantiene la proyección de crecimiento entre 3,3% y 5,3%. Condiciones financieras menos amplias y el efecto de los mayores precios de los alimentos y los combustibles sobre el ingreso disponible real han restringido la expansión de la demanda. A su vez, la oferta se ha visto afectada negativamente por los mayores costos de producción, los cuales reducen el crecimiento de la producción al tiempo que elevan los precios. Es de esperar que en 2008 la inflación anual se mantenga alta en los próximos meses por los elevados precios de los alimentos y los combustibles. Posteriormente, tanto la inflación total como los indicadores de inflación básica podrán disminuir de manera gradual, siempre y cuando las expectativas de inflación continúen a la baja y el crecimiento salarial sea moderado. El compromiso de la autoridad monetaria con las metas de inflación de largo plazo promueve las condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo. Conforme a lo anterior, la Junta Directiva de manera unánime decidió mantener inalterada las tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de las presiones inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 5 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó por unanimidad dejar inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República.
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Descripción

Este corpus ha sido creado con el fin de consolidar las minutas de política monetaria del Banco de la República (el banco central de Colombia) y para hacerlas fácilmente disponibles para la investigación. Las minutas describen los factores tenidos en cuenta por los miembros de la Junta del Banco de la República en sus decisiones de política de tasas de interés, así como la decisión misma. Los corpus sobre las minutas de los bancos centrales han sido ampliamente utilizados en la literatura económica, tanto para construir indicadores de sentimiento como para extraer indicadores de política monetaria y variables económicas desde datos no estructurados basados en texto. Comúnmente los corpus existentes se encuentran en idioma inglés. Sin embargo, según nuestro conocimiento, este es el primer corpus sobre política monetaria disponible en idioma español.

En el corpus las minutas comienzan en junio de 2007, cuando la Junta Directiva del Banco de la República decidió comenzar la publicación de las mismas.

Los datos pueden cargarse usando Python de la siguiente manera:

from datasets import load_dataset

ds = load_dataset("yabramuvdi/MinutasBanRepCol", "default", split="train")

Motivación

La literatura económica ha utilizado recientemente los comunicados de los bancos centrales como una rica fuente de datos para el análisis. Hansen et al. (2018), por ejemplo, analizan la forma en la que la transparencia afectó las deliberaciones de política monetaria de la Reserva Federal.

Sin embargo, hasta la fecha no existen fuentes de datos consolidadas de acceso público para bancos centrales cuya lengua oficial es el español. Con este corpus aspiramos comenzar este camino de incrementar la cantidad de bases de datos públicos de calidad en español.

Estructura

Este dataset tiene formato tabular (185 x 2). Cada observación contiene los siguientes atributos:

  1. fecha: Año, mes y día (AAA-MM-DD) de publicación de la minuta. El día de la fecha no es exacto, por lo que todas las fechas tiene como día el primer día del mes.
  2. text: Texto extraído de las minutas originales en PDF.

Fuente de los datos

Los archivos originales en format PDF con las minutas se pueden encontrar en la página del Banco de la República de Colombia. Agradecemos a Fredy Muñoz por su colaboración en consolidar el conjunto de minutas.

Procesamiento de los datos

El texto de las minutas fue extraído de los PDFs usando PyMuPDF. Ningún paso de preprocesamiento de texto fue aplicado con el fin de conservar toda información posible y dejar a discreción del usuario los pasos relevantes.

Política de uso y citación

El corpus puede usarse libremente para fines no comerciales haciendo la atribución a los autores:

@misc{Muvdi2024BanRep
      title={Minutas Política Monetaria Banco de la República Colombia}, 
      author={Muvdi Yabra and Javier Gómez},
      year={2024},
      url = {https://huggingface.co/datasets/yabramuvdi/MinutasBanRepCol/}
}
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